En medio de un complicado inicio de torneo, Yoshimar Yotún dijo que Cruz Azul es consciente del fastidio de la afición por el ayuno de 22 años sin título, por lo que saben que el equipo tiene la responsabilidad de conseguir el campeonato, mas no es una obligación.

Hay varios jugadores aquí que no tienen nada que ver con la historia, pero arrancamos desde un nuevo punto, trataremos de dejar ese tiempo atrás, donde no se ha ganado nada, dijo. Tenemos la responsabilidad, pero no la obligación. Vamos a tratar de darle un millón de trofeos a este club que se lo merece, agregó.

Destacó que aunque apenas tiene seis meses con el plantel y no es culpable de los fantasmas que acechan, tiene el compromiso de estar en lo más alto con La Máquina.

Brazos abiertos para Angulo

Ante la posibilidad de que el ecuatoriano Brayan Angulo se convierta en jugador de los celestes, Yotún dejó claro que son temas de los que se encarga la directiva, pero en caso de llegar al plantel será recibido con los brazos abiertos para que se adapte lo antes posible.

Angulo llegaría procedente del Emelec, donde ha marcado nueve tantos en este año. El lateral reforzaría la ofensiva de La Máquina que se había tenido que respaldar en Milton Caraglio ante la escasa productividad de goles que ha tenido Martín Cauteruccio.

La escuadra celeste no ha tenido los resultados esperados en el comienzo de la temporada al empatar en las dos jornadas; sin embargo, Yotún afirmó que el plantel se encuentra bien con fortaleza mental.

Sé que no hemos ganado y aunque suene raro lo que voy a decir, vamos por buen camino, aseguró al dejar claro que sabemos hacia donde ir, tenemos el estilo de juego que nos va llevar a hacer lo que nosotros queremos.

Aseveró que el duelo del sábado ante Querétaro, equipo dirigido por Víctor Manuel Vucectich, será un reto importante para encontrar el primer triunfo en la temporada.

Siempre tenemos que ganar, ya sea de visita o de local: estamos enfocados en lograr los tres puntos y por eso nos choca y nos duele no haber sacado la primera victoria.