María Elena Álvarez Buylla pide a legisladores promover coinversiones
Sábado 27 de julio de 2019, p. 33
El Conacyt propuso a los sectores público, privado y científico generar sinergias que impulsen la innovación, la investigación científica y los desarrollos tecnológicos que la sociedad requiere para crecer y que se refleje en mayor bienestar para todos con respeto al ambiente
. María Elena Álvarez-Buylla Roces, directora General del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, adujo que en esa instancia se impulsa y protege el pensamiento crítico, se promueve el diálogo respetuoso y la libertad de información. Es una institución, a partir de este sexenio, transparente y de puertas abiertas, no solamente al resto de la comunidad científica, sino a toda la ciudadanía. Conacyt agradece por ello y celebra las voces críticas, al mismo tiempo que las invita a colaborar activa y proactivamente con la transformación del país y encaminar sus energías en la construcción de una nación más equitativa, justa y democrática.
Al participar en la Primera Convención Nacional Presupuestaria en materia de ciencia, tecnología e innovación, convocada por el diputado Alfonso Ramírez Cuéllar, celebrada en el Palacio Legislativo de San Lázaro, la especialista subrayó que la transformación institucional es una responsabilidad de todos los implicados en el desarrollo.
En tanto, Frédéric Vacheron, representante de la Unesco en México, ponderó las 88 entidades y centros públicos de investigación, y que el Sistema Nacional de Investigadores pasó de más de 16 mil a 28 mil investigadores, de 2010 al 2018. No obstante, México está todavía lejos del promedio deseado; 37 por ciento de los investigadores a escala nacional son mujeres, pero el acceso de las féminas a los puestos de decisión es todavía limitado.
La doctora Álvarez-Buylla Roces enfatizó el compromiso de alcanzar para México la garantía del derecho humano, del derecho constitucional, que establece que los beneficios de la ciencia, la tecnología y la innovación son para todas y todos los mexicanos y mexicanas. “Además de corresponder a esta exigencia social de cambio, las políticas que se habían venido implementando tuvieron resultados poco favorables que nos han posicionado dentro de los lugares más bajos entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos; por ejemplo, tenemos tan sólo 0.72 investigadores por cada mil habitantes, mientras que en Bra-sil tienen 2.67 y en Singapur, 10.12.
De 2013 a 2018 hemos perdido 16 lugares en los indicadores sobre eficiencia que presenta la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual en términos de innovación, pero el gasto aumentó. ¿Qué pasó aquí?, a pesar de haber destinado más recursos el país descendió 16 lugares en su capacidad, en su eficiencia de innovación, y pues con ello se obtuvieron relativamente menos patentes y desarrollos que pudiesen ser el sustento de industrias nacionales con base científica y tecnológica
, reitero.
En su extensa exposición, la directora del Conacyt reporchó la homogenización de las prioridades educativas, de salud, de cultura y de mercado impuestas sin considerar el contexto local y las necesidades particulares de las comunidades, imponiendo así una forma única de hacer las cosas y de ver el mundo, y esto no ha redundado en un bienestar social y en un cuidado ambiental.
Refirió que en el Conacyt opera una profunda transformación de su aparato burocrático para dedicar los recursos a apoyar a los jóvenes mediante becas, estímulos y para fortalecer el Sistema Nacional de Investigadores y ampliar las incorporaciones a éste y también sanear las finanzas de los centros públicos de investigación.
Estamos comprometidos a ejercer esos recursos bajo el principio de austeridad republicana, eficiencia y eficacia presupuestal, con honestidad, transparencia y rigor, que permiten, que está ya permitiendo, a pesar del recurso limitado, liberar recursos inéditos para el apoyo a la ciencia.