San Francisco. Una investigación militar sobre tráfico de personas produjo el jueves el arresto de 16 infantes de Marina mientras se formaba el batallón en Camp Pendleton, California, base ubicada a una hora por carretera de la frontera con México.

Ninguno de los arrestados estaba involucrado en actividades de seguridad fronteriza, indicó el Cuerpo de Infantería de Marina en un comunicado. No se logró contactar por el momento a oficiales para solicitar su comentario.

Las detenciones ocurrieron semanas después de que dos marines fueran arrestados por un agente de la Patrulla Fronteriza. Los dos elementos fueron acusados de ingresar ilegalmente a tres mexicanos a suelo estadunidense.

De acuerdo con el Cuerpo de Infantería de Marina, la información obtenida durante esos arrestos derivó en las detenciones del jueves.

Los militares están acusados de contrabando de personas y delitos relacionados con drogas.

Otros ocho elementos están siendo interrogados sobre su supuesta participación en delitos relacionados con drogas.

Camp Pendleton, la mayor base del Cuerpo de Infantería de Marina en la costa oeste de ese país, se ubica a 90 kilómetros al norte de la frontera con México.

El gobierno de Donald Trump se vio frustrado en su intento de aplicar nuevas restricciones a las solicitudes de asilo que cruzan la frontera sur, el revés más reciente para el mandatario que libra una batalla acérrima en los tribunales para frenar la migración.

El juez Jon Tigar, con sede en San Francisco, emitió su decisión el miércoles, horas después de que un magistrado en Washington decidiera que las normas permanecieran vigentes. El dictamen de California suspende la medida en toda la frontera en lo que las demandas siguen su curso legal.

La nueva medida le impediría a la mayoría de los migrantes solicitar asilo en Estados Unidos si pasaron primero por otro país. La mayor parte de los migrantes que atraviesan la frontera provienen de Centroamérica, por lo que casi nadie cumpliría los requisitos debido a que tuvieron que pasar primero por México.

Afectaría también a los procedentes de África, Asia y Sudamérica que suelen llegar a la frontera sur.

La Casa Blanca condenó la decisión del juzgador calificándola de tiranía de un sistema disfuncional. La secretaria de prensa de Trump, Stephanie Grisham, declaró el jueves que los demandantes en este caso hallaron un sólo juez que trata de fijar la política migratoria de todo el país. Añadió que Trump usará todas las opciones a su disposición para encarar este fallo infundado y defender las fronteras.

Las restricciones entraron en vigor la semana pasada, aunque hubo reportes contradictorios sobre si las agencias federales de inmigración las estaban ejerciendo o no.

Altos funcionarios federales aseguran que su plan desalentaría a los migrantes a dejar sus países de origen, lo que señalan es necesario para reducir el número de personas detenidas por agentes fronterizos.

En otro tema relacionado, las autoridades de migración de Estados Unidos pusieron en libertad a un ciudadano estadunidense de 18 años de edad después de que permaneció detenido por error durante más de tres semanas.

Francisco Erwin Galicia salió el martes de un centro de detención del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en Pearsall, Texas. Su abogada, Claudia Galan, confirmó que fue liberado horas después de que el diario The Dallas Morning News reportó su caso y atrajo la atención nacional.