Teherán. Irán abandonará otros dos compromisos tomados en el contexto del acuerdo internacional sobre su programa nuclear a partir del 7 de julio, informó ayer el almirante Alí Shamjani, secretario general del Consejo Supremo de Seguridad Nacional, reportó la agencia iraní Fars.

Este anuncio no significa necesariamente la sentencia de muerte del Plan de Acción Integral Conjunto como se denomina al acuerdo nuclear pactado entre Irán y potencias en 2015 para limitar su programa de armas, pero revela, según los expertos, una nueva etapa en su desintegración progresiva tras la retirada unilateral de Estados Unidos en mayo de 2018.

Shamjani destacó el agotamiento de Teherán ante las promesas de los europeos, que dicen querer salvar el acuerdo desde la retirada de Washington, pero carecen de los medios para concretarlo.

Irán dejará de respetar las restricciones impuestas en cuanto al grado de enriquecimiento de uranio (limitado a 3.67 por ciento por el acuerdo de Viena). Además podría reanudar la construcción de un reactor de agua pesada en Arak, interrumpido luego del acuerdo.

El presidente Donald Trump amenazó con borrar partes de Irán si la república islámica ataca a cualquier estadunidense, mientras que Teherán dijo que las más recientes sanciones cerraron la vía diplomática entre los dos países.

Trump tuiteó que ante cualquier ataque de Irán a cualquier cosa de Estados Unidos se va a encontrar con una fuerza grande y aplastante. En algunas áreas, aplastante significará aniquilación.

El magnate calificó de ignorante e insultante la respuesta de Irán a su oferta de diálogo tras el anuncio, la víspera, de nuevas sanciones contra este país que conciernen al guía supremo iraní, el ayatola Alí Jamenei, y a altos mandos militares.

Sanciones, ¿para qué?, ¿para congelar los activos del guía? Pero nuestros dirigentes no son como los de los otros países que tienen miles de millones en sus cuentas en el extranjero para que ustedes puedan imponerles sanciones. Esta Casa Blanca está afectada por retraso mental y no sabe qué hacer, declaró el presidente iraní, Hassan Rouhani quien calificó las sanciones contra el líder supremo iraní de indignantes y estúpidas, porque el clérigo chiíta de 80 años “lleva una vida sencilla y lo único que tiene son lugares para rezar.

Al mismo tiempo que llaman a negociaciones ¡Buscan sancionar al ministro de Relaciones Exteriores (Mohamed Javad Zarif)! Es evidente que mienten, añadió.

Desde Israel, el asesor de seguridad Nacional de Estados Unidos, John Bolton, dijo que el diálogo aún era posible y que dejan una puerta abierta a Irán. El portavoz de la cancillería iraní, Abbas Mousavi, afirmó que imponer sanciones estériles contra el guía supremo de Irán y el jefe de la diplomacia iraní es cerrar de manera permanente la vía de la diplomacia.

En una conversación telefónica con su par francés, Rouhani dijo a Emmanuel Macron que: si los estadunidenses quieren violar otra vez el espacio aéreo de Irán o entrar en sus aguas, las fuerzas armadas de Irán se opondrán y darán una respuesta decidida, según un comunicado publicado en la web de la presidencia iraní.

Rouhani reiteró que Irán no busca guerra con ningún país y acusó a Estados Unidos de agudizar las tensiones en Medio Oriente. Al referirse al acuerdo nuclear, subrayó que Teherán no va a renegociar el pacto bajo ninguna condición y aseguró que Irán continuará cumpliendo con los compromisos asumidos si el resto de los participantes del pacto garantizan los intereses de la república islámica.

Irán cometería un grave error si viola el acuerdo nuclear de 2015, advirtió el ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Yves le Drian e hizo un llamado a actuar juntos para evitar una escalada en el golfo Pérsico.

Moscú calificó de imprudentes y desestabilizadoras las nuevas sanciones estadunidenses contra Irán y acusó a Washington de intentar cortar las vías de negociación sobre el programa nuclear iraní.

También y respaldó la versión iraní del derribo del dron estadunidense cuando el secretario del Consejo de Seguridad ruso, Nikolai Patrushev, dijo disponer de informaciones del ministerio ruso de Defensa que demostraban que el aparato se encontraba en el espacio aéreo iraní.

El secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, Jens Stoltenberg, pidió calma en la región del Golfo Pérsico e indicó que la alianza militar no tiene un papel formal en la disputa entre Estados Unidos e Irán.

Teherán y Washington rompieron sus relaciones diplomáticas en 1980 tras la revolución islámica y la toma de rehenes en la embajada estadunidense en la capital iraní. Bajo la administración del presidente Barack Obama se produjo un acercamiento que concluyó con el acuerdo en 2015 por el cual Teherán renunciaba a dotarse del arma nuclear, del que Trump salió unilateralmente en 2018.

El 20 de junio Irán derribó un dron estadunidense que, consideró, sobrevolaba su espacio aéreo. Además Estados Unidos acusó a Irán de estar detrás de ataques contra barcos petroleros en el mar de Omán, lo que ésta niega.