Grupo Vidanta Morán, propiedad del empresario Daniel Chávez, que construye un complejo turístico en la comunidad Jarretaderas, municipio de Bahía de Banderas, Nayarit, aseguró que cumple con la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (Lgeepa); asimismo, negó obstruir el paso de la población a la playa y dañar inmuebles particulares, como sostienen habitantes.

El consorcio envió una carta en respuesta a las notas publicadas por La Jornada los pasados días 26 y 28 de mayo con los encabezados Intentan abrir accesos al mar bloqueados por grupo Vidanta en Nayarit y Vidanta bloqueó el acceso al mar y a un río en Bahía de Banderas.

En la misiva, Grupo Vidanta afirma que “siempre ha garantizado al ciento por ciento a toda la población el derecho de libre acceso o tránsito, previsto en (la) Ley General de Bienes Nacionales y la Ley de Aguas Nacionales y sus respectivos reglamentos, aunado también al propósito y compromiso de preservar las condiciones del hábitat natural de especies endémicas, amenazadas, en peligro de extinción o sujetas a protección especial, de conformidad con el artículo 79 fracciones primera y tercera de la Lgeepa.

Grupo Vidanta reitera y prueba que el derecho al libre acceso al tránsito peatonal es, ha sido y siempre será garantizado. Agregó que de acuerdo con el plan municipal de desarrollo de Bahía de Banderas, “los accesos al mar se denominan ‘ventanas al mar’ y ninguna de ellas se encuentra ubicada en terrenos” propiedad de la firma.

Resulta ser todo lo contrario: Grupo Vidanta construyó un camino de concreto hidráulico de excelentes características que conecta la parte central del poblado con el río Ameca, camino que desde su construcción ha estado en pleno uso y ha facilitado a los pobladores de Jarretaderas el acceso al río en forma extraordinaria, afirmó.

También consideró imposible que sus trabajos afecten viviendas de la comunidad, debido a la distancia entre ambos puntos. Vidanta invitó a quienes hicieron tal señalamiento a que contraten a cualquier tercero calificado para que se haga un peritaje profesional y advirtió que se reserva el derecho en su caso de exigir pago de daños por difamación.

En cuanto a las acusaciones de vecinos de que se apropió de un terreno que aún disputa con el ejido El Valle, señaló que no se le ha requerido pago alguno ni se le ha demandado por incumplimiento de obligaciones contractuales, motivo por el cual negamos de forma categórica y absoluta cualquier aseveración de apropiación ilegal.

En el documento dijo ser una empresa comprometida con la conservación del medio ambiente y con la responsabilidad social. Recordó que cuando llegamos a Bahía de Banderas, Nayarit, la población de Jarretaderas no contaba con planta de tratamiento de aguas negras, por lo que Grupo Vidanta, con recursos propios, construyó la planta para servir a toda la comunidad.

Mencionó que el río Ameca inundaba el poblado de Jarretaderas prácticamente todos los años y el agua alcanzaba hasta dos metros de altura, causando enfermedades y pérdidas económicas. Por ello, hace 15 años construyó un bordo de protección con sus propios recursos y hasta la fecha no ha habido anegamientos en la localidad.

Grupo Vidanta, también con propios recursos, construyó en Jarretaderas las instalaciones de la Fundación Delia Morán Vidanta, que son de verdadera excelencia y están dedicadas a dar tutorías, así como una serie de actividades culturales y deportivas exclusivas para niños de más bajos recursos, en las que se les incluyen alimentos de excelencia así como uniformes.

De igual manera, expuso que existe un pequeño grupo de personas que desea desestabilizar el ambiente social en Jarretaderas con el único objeto de buscar beneficios personales. Es por eso que Grupo Vidanta no ha cedido ni cederá ante este tipo de situaciones.