La Procuraduría General de Justicia (PGJ) de la Ciudad de México ha recuperado 41 inmuebles invadidos por grupos armados o donde sus dueños han sido desalojados con amenazas o presentando escrituras u órdenes de lanzamiento falsas.

A la fecha se tienen 311 carpetas de investigación por despojos en toda la ciudad, aunque la mayoría son en Cuauhtémoc, Tlalpan y Benito Juárez; los adultos mayores son las principales víctimas.

Tres notarios del estado de México y uno de Guerrero han participado en este ilícito al presentar escrituras con los nombres de los nuevos poseedores, y obligando a los dueños a firmarlas, pues en la mayoría de los casos están solos.

Vecinos y comerciantes del oriente del Centro Histórico denunciaron que la invasión y el despojo, por integrantes de las organizaciones criminales La Unión y La Anti-Unión Tepito, están latentes, a fin de quedarse con viejas vecindades y convertirlas en plazas comerciales.

Cuando los inquilinos se encuentran en inmuebles intestados o con rentas congeladas, les presentan escrituras falsas y con apoyo de notarios proceden a desalojarlos sin problema. Si son dueños legítimos les ofrecen hasta 100 mil pesos para que se vayan o de lo contrario se usará la fuerza para sacarlos y serán obligados a entregarles su patrimonio, pues de nada sirve denunciar a las autoridades, señalaron.

Hay 44 inmuebles en esos dos casos y se han convertido en plazas comerciales irregulares, pues no cuentan con uso de suelo, dictámenes o manifestación de obra y no son clausuradas, agregaron.

De esta manera, sus locales son vendidos fraudulentamente, pues no existe una escritura de compra-venta y en el Registro Público de la Propiedad aparecen como vecindades, por lo que se cobran bajo ese régimen el predial y el agua, cuyo pago es bajísimo, denunciaron.

Los únicos beneficiados con invasión, despojo y construcción de plazas irregulares en las calles Manuel Doblado, Leona Vicario, Jesús María, Venezuela y Rodríguez Puebla, Lecumberri y Callejón de Mixcalco son La Unión y La Anti-Unión, y las autoridades “están coludidas con ellos, aseguraron los denunciantes.