La Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) impuso una multa de 40 millones 833 mil 537.50 pesos a la empresa constructora de la Torre Mítikah por la tala de 80 árboles en el pueblo de Xoco, en la demarcación territorial Benito Juárez, tras comprobar que no contaba con el permiso correspondiente.

Los días 3 y 4 de mayo empleados de Fibra Uno derribaron 54 árboles sobre el camellón de la calle Real de Mayorazgo y el resto en un predio cercano para comenzar los trabajos de construcción de un paso a desnivel que se había planteado como medida de mitigación, el cual tampoco estaba autorizado.

Esa obra tenía como propósito facilitar el acceso y la salida de los vehículos a las dos torres de 35 niveles previstas en la segunda fase del proyecto inmobiliario, cuya construcción tampoco contaba con los permisos debido a que Fibra Uno pretendía incrementar en 16 mil metros cuadrados su edificación sin presentar estudios de impacto ambiental y urbano.

Desde el 14 de marzo el gobierno capitalino había notificado a la empresa la cancelación de la fase dos del desarrollo inmobiliario y el 10 de abril lo hizo para el paso a desnivel –que se pretendía construir a través de un permiso administrativo temporal revocable (PATR)–, pero la empresa decidió, a principios de mayo, derribar el arbolado sobre el camellón.

La Dirección General de Evaluación de Impacto y Regulación Ambiental informó ayer por la tarde que ya notificó a la inmobiliaria sobre la sanción que impuso después de las visitas de inspección que se realizaron para verificar el cumplimiento de condicionantes establecidas en la resolución administrativa SEDEMA/DGRA/DEIA/016521/2018.

El 13 de mayo se notificó a la empresa el acuerdo administrativo mediante el cual se les concedió el término legal previsto en la legislación supletoria aplicable en la materia (cinco días hábiles), para que manifestaran lo que a su derecho conviniera, y en su caso presentaran las documentales y/o pruebas idóneas que consideraran necesarias correspondientes al procedimiento que se está llevando a cabo.

El 21 de mayo Fibra Uno ingresó ante la oficialía de partes de la Dirección General de Evaluación de Impacto y Regulación Ambiental un escrito en el que hizo sus manifestaciones respecto al acuerdo notificado, sin demostrar que tuvieran los documentos que les autorizara el derribo de los árboles.