Contrario a lo expuesto por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), las cuentas de los trabajadores de Altos Hornos de México (AHMSA) nunca han estado congeladas, declaró a La Jornada Francisco Orduña Mengiola, vocero de la siderúrgica.

Aseveró que incluso 24 horas después de que el banco les avisó acerca del bloqueo financiero, la empresa jamás recibió una notificación oficial. Lo único que tenemos es un aviso del banco, de ayer, cuando íbamos a hacer una operación financiera, y un comunicado de prensa de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la SHCP. Ahora nos dicen que podemos hacer uso del derecho de audiencia, o sea, a toro pasado, sostuvo.

El lunes, Hacienda informó del bloqueo de cuentas a la empresa, así como a Emilio Lozoya Austin, ex director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), debido a que se identificaron en el sistema financiero nacional e internacional múltiples operaciones con recursos que presuntamente no proceden de actividades lícitas, mismos que se presumen ser derivados de actos de corrupción, explicó la dependencia federal.

Orduña Mengiola recalcó que sin una investigación notificada de la Fiscalía General de la República, la Unidad de Inteligencia Financiera no puede parar sus cuentas, así lo establece una resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Mientras, Hacienda asegura que la Convención de Palermo, la de Viena y la Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita facultan para ello al área que encabeza Santiago Nieto.

Como parte de un análisis que involucra la compra por Pemex de Agronitrogenados a AHMSA y las transferencias de una offshore de Odebrecht –la constructora brasileña que presuntamente repartió sobornos en América Latina a cambio de obra pública–, la UIF congeló las cuentas de la empresa.

“Ahora dicen que es dinero ilícito, pues que congelen las cuentas de Pemex, ellos fueron los que pagaron (…) Nos ligan con Odebrecht, Odebrecht entregaba dinero, nosotros no hemos recibido un peso de Odebrecht”, zanjó Orduña.

Rechazó que se vendiera a Pemex una planta chatarra, pues la transacción implicó bodegas, patios y un muelle marítimo, que es el principal de Pajaritos, que no dejó de funcionar.

La planta se vendió con una valuación del Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales, y se fijó un precio menor al que nosotros queríamos, aseveró. Empresas inglesas y mexicanas valuaron Agronitrogenados en 390 y 400 millones de dólares. Al final se vendió en 275 millones.

El vocero de AHMSA refirió que en aquel momento buscaron comprar una planta de amoniaco a Pemex para evitar el precio de transferencia de ese producto. “En ese proceso, de repente dijeron ‘no, sabes que, Presidencia de la República quiere comprar la planta porque hay un programa nacional de fertilización’ y ahí nos voltearon la jugada.

Incluso, cuando se vendió (Agronitrogenados), nosotros ya le habíamos metido 50 millones de pesos, faltaban cien. Ahora, que en manos de Pemex el proyecto de rehabilitación se fue a 800 millones, pues ya es problema de ellos, sostuvo.