Viernes 24 de mayo de 2019, p. 33
Gran parte de los incendios son para remover la vegetación y destinar la tierra a huertas de aguacate, alimento de alta demanda internacional, así como especu-lación inmobiliaria. Si bien la legislación prohíbe el cambio de uso del suelo en tierras forestales incendiadas, la actuación oficial para hacer cumplir esta prescripción es nula, comentaron expertos.
Durante las pasadas tres décadas una tercera parte de los bosques de la Meseta Purépecha en Michoacán se han convertido en huertas de aguacate sin permiso de cambio de uso del suelo, advirtió el Observatorio del Seminario Universitario de Sociedad, Medio Ambiente e Instituciones de la UNAM (O-Susmai).
Ayer se registraron 66 incendios activos, 15 estaban en proceso de liquidación, la mayor parte concentrados en 17 estados, y 10 en áreas naturales protegidas, como Cumbres de Monterrey, la Sepultura en Chiapas y Sian Ka'an en Quintana Roo.
En un análisis, el observatorio señaló que en 30 años la experiencia forestal del país muestra que los sitios con menor incidencia de incendios y mayor capacidad de respuesta son aquellos donde las comunidades locales manejan el bosque, ya que se vigilan sus condiciones en forma cotidiana, aplican medidas de prevención y tienen técnicas antincendios.
El observatorio refiere que este manejo forestal comunitario recibe recursos públicos marginales y la crisis reciente hace evidente que los recortes para la protección de bosques, tanto en la Ciudad de México como en los estados, han limitado las capacidades locales para responder al fuego.
La Red Mocaf, asociación de campesinos forestales, consideró que los llamados incendios en la floresta más bien son rurales, ya que la mayor parte de ellos se generan en quemas agropecuarias y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural debe involucrarse.
Indicó que México posee un registro estadístico de incendios forestales desde hace casi 50 años, pero desde 1970 se evalúa modificarlo para además de tener el número de siniestros y la superficie afectada en ese periodo se tome en cuenta la grave afectación de arbolado, así como las toneladas de bióxido de carbono que se emiten a la atmósfera.
Polioptro Martínez, director de la cátedra Unesco, sostuvo que aunque hay incendios en todo el mundo por la elevación de la temperatura, en México van en aumento, mientras en el resto del orbe están la baja.