Sólo sostuve que hay dispendio e ineptitud, aclara el director del FCE en entrevista con La Jornada
Viernes 17 de mayo de 2019, p. 4
Paco Ignacio Taibo II responde a la polémica por las declaraciones acerca de la Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil (FILIJ): ‘‘esperen y una vez que la hagamos critiquen. Lo discutimos y vemos si salió o no. Mientras esperan tengan claro que no hay ningún tipo de animadversión contra la FILIJ, sino que la estimamos y valoramos profundamente; pensamos que ha sido un éxito a lo largo de los años, pero tiene que ser más barata. Y va a ser más barata”.
El director del Fondo de Cultura Económica (FCE) recibe a La Jornada en el séptimo piso de la sede de esa editorial.
‘‘No existe una declaración en la que yo diga que estoy en contra de la FILIJ. Mi única declaración fue al paso en una conversación diciendo: ‘hay dispendio, hay derroche’. Punto.
‘‘Me preguntaron, ‘¿por qué el derroche?’ Dije: ‘por ineptos’. Debí ser más suave, decir: ‘vaya usted a saber por qué’; pero no se me da la suavidad en el uso del adjetivo.”
Todo este ‘‘seudodebate que se ha armado sobre la FILIJ tiene que ver con que para variar y como de costumbre, de manera imprudente, dije que el problema con la FILIJ es que había sido mal hecha, por un problema de ineptitud y despilfarro. Se interpretó como que no me gustaba. Nada hay de eso”.
Reconoce que esa feria ‘‘ha sido muy exitosa y muy brillante”, aunque el problema es que ‘‘nos topamos con que que la anterior FILIJ se hizo con un costo de 42 millones de pesos sin tomar en cuenta lo que gastó el FCE, sólo del lado de la Dirección General de Publicaciones y es insostenible, es tres veces el Zócalo, es de locos. Es hacer ferias de países ricos en países que no lo son; hay que ajustar número de invitados, de boletos de avión, patrocinios, y en principio tuvimos que ajustar lo más obvio, que es el lugar”, en referencia al Parque Bicentenario en Azcapotzalco, cuyas instalaciones se rentaban.
Por eso ‘‘la primera decisión es regresar la FILIJ” al Centro Nacional de las Artes (Cenart), en Tlalpan y Churubusco, ‘‘que puede admitir fácilmente el público que se calcula, que en el nivel más alto son medio millón en 14 días”.
Ferias en CDMX y Mérida
La segunda decisión fue organizar dos ferias: una en la Ciudad de México y la otra en Mérida, con la posibilidad de que el año próximo se realice en una tercera ciudad en el norte. Aquí se aprovecharía la visita de autores internacionales para que vayan de una urbe a otra. ‘‘De ahí surge toda una respuesta de algunos autores diciendo: ‘¿por qué nos maltratan’, y el #laFilijlahicimostodos. Sí, todos los que la hicieron, la hicieron muy bien, pero el que hizo el presupuesto no lo hizo tan bien”.
Varias actividades en paralelo competían unas con otras por el público; tampoco ‘‘puedes tener siete estrellas invitadas el mismo día; tienes que repartirlas. Una feria tiene que tener una dimensión de aprovechar los recursos que tienes de la mejor manera posible. De entrada la primera reacción fue bajar más de 50 por ciento los gastos fijos, que no es sorprendente: si nosotros en un mes pudimos bajar 50 por ciento racionalizando los gastos fijos, ya no hablemos de lo demás, y ahora viene la gran tarea de disminuir los gastos de producción, animación, programación, entre nosotros y el apoyo de la industria editorial’’.
Se trata de racionalizar
–¿Se va a reducir el número de actividades, participantes, estands?
–No, creo que el número de estands crece y el número de actividades a lo mejor se concentra. En lugar de tener en dos foros diferentes una animación infantil y en otro una obra de teatro, tendremos un escenario donde hay una animación infantil y después una obra de teatro. Se trata de racionalizar. Es un problema de programación, pero es algo que hemos hecho quienes estamos aquí durante veinte años, la experiencia de la Brigada, la mía en la dirección de la Semana Negra de Gijón.
‘‘No hay razón para las quejas de que no queremos a la FILIJ. Sí la queremos, tan la queremos que la vamos a duplicar, vamos a hacer dos ferias.”
La advertencia de Protección Civil de que se había rebasado el límite permitido de visitantes en el Cenart, una de las causas principales del traslado al Parque Bicentenario, ‘‘está cubierto. Ayer estuve viendo la propuesta y está cubierta cien por ciento. No hay ningún peligro”.
–¿Cuánto están calculando que cueste?
–No lo sé. Mucho menos que la anterior. Hasta ahora la disminución, en el costo presupuestal, cayó sobre la infraestructura y los fijos. Ahí te digo que bajamos 50 por ciento, pero no se ha revisado programación, animación, etcétera.
En cuanto a la edición de libros infantiles y juveniles en el FCE, Paco Ignacio Taibo II afirma: ‘‘sigue al ritmo al que iba, 32 por ciento de los libros del FCE. Son libros que funcionan muy bien, que han tenido éxito tras éxito. Adelante. No los toqué’’.