Por primera ocasión sin un anuncio conjunto entre la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SEP), el gremio magisterial informó que se alcanzó un acuerdo con el gobierno federal para destinar un incremento global de 6.5 por ciento a docentes y directivos de educación básica, retroactivo al primero de enero.

Para el personal de apoyo y asistencia a la educación el aumento será de 5.85 por ciento, mientras el homologado (docentes, no docentes, y de apoyo y asistencia a la educación de los niveles medio superior y superior) tendrá un incremento de 6.15 por ciento retroactivo al primero de febrero.

Los incrementos beneficiarán a más de 1.5 millones de trabajadores.

En un comunicado, Alfonso Cepeda Salas, secretario general del SNTE, aseguró que los acuerdos alcanzados en materia salarial están directamente relacionados con el crecimiento del país y con la inflación.

Al dar a conocer la respuesta al Pliego Nacional de Demandas 2019, que negoció por dos meses con la SEP, afirmó que este año se favoreció la certeza laboral de quienes ya tienen una plaza, pero también de los que por años han esperado la basificación, y anunció que en breve iniciará un programa para regularizar la situación de educadores de formación básica y bachillerato.

Con la aprobación unánime del pliego por parte de los 245 concejales que acudieron a la 48 sesión extraordinaria de su consejo nacional, aseguró que éste se construyó en el contexto de la política económica emprendida por el nuevo gobierno. Con esta negociación, dijo, se luchó por alcanzar un incremento salarial digno y mejoras prestacionales para los agremiados.

En la sesión del consejo, Cepeda Salas rindió el Informe general de actividades de los órganos nacionales de gobierno sindical por los primeros 171 días al frente del gremio, el cual fue aprobado por el pleno.

El dirigente sindical agregó que los llamados desesperados a la discordia, la división y la venganza se han encontrado con un sólido dique de lealtad a nuestras convicciones y valores sindicalistas.

El dirigente reiteró que el SNTE no es patrimonio personal de nadie, no es heredable, nadie tiene el derecho a reclamarlo para sí mismo; estamos decididos a evitar un nuevo asalto. Parafraseando a nuestro Presidente, al margen del estatuto, nada; por encima del estatuto, nadie.