Riad. Arabia Saudita denunció ayer que dos de sus buques petroleros estaban entre las cuatro embarcaciones atacadas este domingo frente a las costas de Emiratos Árabes Unidos (EAU) y aseguró que se trató de un intento de socavar la seguridad de los suministros mundiales de crudo, en momentos de tensión entre Estados Unidos e Irán.

El presidente estadunidense, Donald Trump, aprovechó el incidente para lanzar nuevas amenazas a la república islámica, y ante periodistas advirtió que si Irán hace cualquier cosa que parezca un ataque, sufrirá considerablemente. No serán felices.

Un equipo militar estadunidense hizo una evaluación preliminar y concluyó que iraníes o aliados de Irán utilizaron explosivos para dañar cuatro buques anclados frente a la costa de los Emiratos Árabes Unidos, según un funcionario citado por la agencia Ap. No hubo otras fuentes que confirmaran este reporte.

Washington confirmó el domingo pasado: un incidente marítimo ha sido reportado en las cercanías de los anclajes de Fujairah, EAU, y recomendó a los buques tener cuidado al transitar esta área durante una semana.

En Irán, las autoridades consideraron preocupantes los actos de sabotaje y exigieron realizar una investigación.

Estos incidentes en el mar de Omán son lamentables, señaló Abas Musavi, vocero del ministerio iraní de Relaciones Exteriores, quien advirtió sobre la aventura de actores extranjeros para perturbar la navegación.

Los supuestos ataques ocurrieron un día después de que la administración marítima estadunidense advirtió sobre una mayor posibilidad de que Irán o sus representantes regionales dañen los intereses de Washington y sus socios, incluida la infraestructura de producción de crudo en la ruta petrolera más importante del mundo, informó el semanario Newsweek.

Los barcos afectados son Al Marzoqah y Amjad, ambos sauditas; A. Michel, emiratí, y Andrea Victory, noruego, que de acuerdo con la compañía naviera Thome, fueron alcanzados por un objeto aún no determinado.

Tras los incidentes no se reportaron heridos ni derrames de combustible, pero sí se informó de daños significativos a las estructuras de los navíos mencionados, indicó Riad.

En este contexto, los cancilleres europeos expresaron en Bruselas su inquietud sobre el aumento de la tensión entre Washington y Teherán, en varias reuniones con el secretario estadunidense de Estado, Mike Pompeo, a quien advirtieron del riesgo de un conflicto por accidente en el golfo Pérsico.

La Organización de las Naciones Unidas también se dijo preocupada la tensión que hay en la zona.

Washington anunció la semana pasada el envío a la región de un barco de guerra con vehículos anfibios y una batería de misiles Patriot, que se añaden al despliegue de una flotilla liderada por un portaaviones y bombarderos B-52.

Si bien la Unión Europea comparte algunas de las preocupaciones sobre la república islámica, incluida su participación en el conflicto en Siria, aún respalda el acuerdo nuclear de 2015, afirmando que lo hace por sus propios intereses de seguridad.

España aseguró ayer que el barco de Arabia Saudita sospechoso de transportar armamento a su paso por el norteño puerto de Santander llevaba armas no letales para una exhibición en los Emiratos Árabes Unidos.