Sábado 11 de mayo de 2019, p. 5
Las calificadoras de riesgo deben ser responsables y serias
al evaluar a Pemex y ver los esfuerzos del gobierno mexicano para que la empresa cumpla con sus inversiones y compromisos, dijo el viernes la secretaria de Energía, Rocío Nahle,.
Varias agencias han puesto bajo la lupa a la petrolera más endeudada del mundo y han advertido que podría perder su grado de inversión debido a su persistente flujo de caja negativo y la necesidad de ingentes inversiones en exploración y producción para reponer sus declinantes reservas.
Pero el presidente Andrés Manuel López Obrador ha acusado a los gobiernos neoliberales
que le precedieron de arruinar a la firma –que tiene una deuda financiera de 106 mil 500 millones de dólares– y de haber arrastrado la producción de crudo a mínimos por la corrupción en la empresa y el país.
Nahle dijo a Reuters estar en desacuerdo con las críticas de algunas calificadoras al plan para destinar 8 mil millones de dólares en la construcción de una refinería de Pemex, en vez de invertir en áreas clave y en rehabilitar las otras deterioradas seis refinerías.
Las calificadoras no pueden bajar o subir [la nota] de acuerdo con intereses políticos
, dijo vía telefónica. “Las calificadoras deben ser muy responsables y serias y nosotros apelamos a eso.
Si Pemex no estuviera cumpliendo sus pagos, sus metas de inversión; si no se estuviera haciendo todo el esfuerzo que está haciendo el gobierno, tendrían razón, pero no tienen razón
, agregó, detallando que ella y directivos de la firma se han reunido con algunas agencias.
Nahle, quien afirma que Pemex requiere de inversión pública y privada para apuntalar la producción de hidrocarburos, recordó que los gobiernos anteriores dispararon la deuda aun en los años de mayor producción y mejores precios del crudo.
En este recorrido no vimos a las calificadoras tan nerviosas
, dijo. La deuda de Pemex saltó desde unos 60 mil millones de dólares en 2012, cuando llegó a la Presidencia Enrique Peña, hasta 106 mil millones al final de su gestión.
La funcionaria dijo que las agencias deberían considerar que Pemex, como se prometió, no recurrió a deuda nueva en el primer trimestre, que fue reducida su carga fiscal y que ya se cuenta con dinero para iniciar la construcción de la refinería. Esas acciones deben beneficiar la calificación de Pemex
, sostuvo.
López Obrador dijo en marzo que las calificadoras castigan
a México por el neoliberalismo que le precedió, luego de que Standard & Poor’s revisó la perspectiva crediticia del país y de Pemex al considerar insuficiente
un plan del gobierno de inyectar a la firma 3 mil 900 millones de dólares.