Los Ángeles. Britney Spears obtuvo una orden temporal de alejamiento contra un ex confidente que según la cantante ha vuelto a acosarla a ella y su familia.

Un juez ordenó el miércoles a Sam Lutfi, de 44 años, quien enfrenta batallas legales con la familia Spears desde hace una década, mantenerse al menos a 183 metros de la cantante, sus padres y sus hijos, de 12 y 13 años.

El juez también le ordenó que no contacte ni hable mal de ningún miembro de la familia.

Según la solicitud de la orden de alejamiento, Lutfi ha estado enviando textos hostigadores y amenazantes a la familia Spears y los ha denigrado en redes sociales.

Las acciones del señor Lutfi han causado trauma mental severo en un momento en que la señorita Spears se recupera del estrés relacionado con la salud de su padre y su trabajo, dice el documento. La injustificada interferencia del señor Lutfi en su vida amenaza la seguridad y el bienestar de la señorita Spears.

Lutfi tuvo gran presencia en la vida de Spears mientras ésta se encontraba en la cúspide de la fama, y alegó ser su mánager en los años previos al colapso emocional público que sufrió en 2008.

Lutfi demandó a la familia Spears en 2009 argumentando que Britney incumplió un contrato con él, que el padre de la cantante lo golpeó y que su madre lo difamó en un libro de memorias. Un juez desestimó la demanda en 2012, otro la restauró más tarde en una apelación, y las partes la resolvieron en 2016.