Martes 7 de mayo de 2019, p. 8
Con su capa de armiño y corona de piedras preciosas Freddie Mercury se autoproclamaba rey absoluto
y vislumbró su futuro en una sola frase: “I won’t be a rock star. I will be a legend”.
Así, impregnado del espíritu de Queen, de sus creaciones y de su mítico vocalista, el Foto Museo Cuatro Caminos reconfiguró el legado de la banda surgida en Londres en 1970, que en sus inicios estuvo integrada por su líder Freddie Mercury, además del guitarrista Brian May y el baterista Roger Taylor, antes de que se uniera el bajista John Deacon.
Intrépida y alucinante resulta la exposición Queen: el origen de una leyenda, que reúne más de 120 fotografías –una docena de ellas inéditas–, videos, portadas de revistas, obra plástica y un diseño sonoro que invita a recordar los legendarios y vibrantes conciertos que marcaron la historia del rock mundial.
Para regocijo de los espectadores también se proyecta la película Bohemian Rhapsody, ganadora de cuatro Óscares, así como videos de la banda, que se pueden disfrutar desde la comodidad de una pequeña sala creada ex profeso para complementar la exposición que abrió hace seis semanas y concluye el 2 de junio.
Cerveza o whisky en mano se pueden disfrutar de otros servicios, como una tienda, cafetería y restaurante durante el recorrido.
De manera simultánea a las imágenes, captadas por el fotógrafo Mick Rock, se recuerdan aspectos como la memorable presentación del grupo en el concierto Live Aid en 1985, en el estadio de Wembley, donde Mercury sacudió cada fibra de las almas que escucharon el alucinante repertorio.
El atuendo con el que apareció el intérprete en aquella presentación –los joviales jeans y la camiseta de tirantes blanca, así como la pulsera de cuero y tachuelas– se exhibe junto con la vistosa capa de armiño, así como un vestido –originalmente diseñado para boda–, uno de los favoritos de Mercury, quien alguna vez dijo que sus conciertos se convertían en desfile de modas
.
El ambiente de la exposición es una saturación de imágenes iconográficas del rock, que muestran figuras de largas caballeras, guitarras, sudor, rostros extasiados, torsos desnudos y atuendos exóticos, además de los músicos en estudios de grabación, sesiones privadas, en backstage, incluso en lugares inimaginables, mientras de fondo se escucha God Save The Queen, tema que durante la gira Magic Tour sonaba al final de todas sus presentaciones.
Esa misma adoración se respira en el recinto ubicado el estado de México. Al final de la muestra, el visitante puede observar el gran retrato con los rostros de los cuatros músicos en un fondo negro, símbolo de Queen y referente musical e iconográfico del siglo XX.
I always knew I was a star, and now the rest of the world seems to agree with me
, se lee entre los muros y las más de 120 fotografías de Mick Rock, con la curaduría de Carolina Montero, que aloja el Foto Museo Cuatro Caminos (Ingenieros Militares 77, Lomas de Sotelo, Naucalpan, estado de México).