Las Vegas. Toda la formalidad y el respeto que privaron durante la gira de promoción de la gran pelea entre Saúl Canelo Álvarez y Daniel Jacobs terminó tras cumplirse el pesaje oficial: los ánimos estallaron y el último cara a cara incluyó un empujón del mexicano ante una provocación del estadunidense.

Si ya se esperaba una pelea emocionante, las cosas quedaron muy calientes en la T-Mobile Arena, donde los ánimos se calentaron al momento de la pose retadora –para la fotografía– previa a la unificación de los títulos de pesos medianos.

En el cara a cara, las frentes de los púgiles rozaron, antes de que el mexicano empujara a su contendiente.

Jacobs fue más evidente al lanzar prácticamente un cabezazo, a lo que Canelo respondió con un empujón, lo que obligó a la intervención de sus equipos para mediar.

Esta es la oportunidad de mi vida, siento que soy el mejor peso medio del mundo y ese hijo de la... va a saberlo mañana, dijo Jacobs con la adrenalina a tope.

“Tiene miedo, tiene miedo. Voy a decirlo en español porque es puro mexicano: ¡Que chingue a su madre!, respondió el jalisciense.

Ante cientos de personas que se dieron cita, los protagonistas del pleito unificatorio se declararon en condiciones de estelarizar la velada; Canelo, con 159.5 libras, y Jacobs, con 160. No obstante, este sábado a primera hora deberán someterse a un segundo pesaje, y quien supere las 170 libras, será penalizado con un millón de dólares. Después de ese trámite son libres de aumentar.

Canelo pondrá los títulos de peso medio del Consejo Mundial de Boxeo y de la Asociación Mundial de Boxeo, mientras Jacobs expondrá el de la Federación Internacional de Boxeo. También se jugarán el Cinturón Maya, simbólico del CMB. Según los momios de esta ciudad, el mexicano es el favorito para llevarse el triunfo. Será su pelea 15 de campeonato y quinta en peso medio, a la que llega con marca de 51 ganadas, 35 de ellas por nocáut, una derrota y dos empates.

Para Jacobs, la de este sábado será su novena pelea de campeonato mundial, todas en peso mediano, y llega con foja de 35 (29) y dos derrotas.

El mexicano, quien firmó un contrato de 365 millones de dólares por 11 peleas con la plataforma digital DAZN, cumplirá con el segundo de esos compromisos, luego de haber vencido en diciembre pasado a Rocky Fielding, a quien destronó de la AMB.

Álvarez, quien ganó apenas 800 pesos en su primera pelea, que fue de exhibición, podría ganar ahora cerca de 30 millones de dólares.

Jacobs viene de superar al ucraniano Sergiy Derevyanchenko, en octubre del año pasado, para hacerse del título de la FIB.

Los encargados del pleito coestelar tampoco tuvieron problemas en la báscula. El estadunidense Vergil Ortiz Jr., quien llega invicto con 12 nocáuts, pesó 147 libras, y Mauricio Maestro Herrera (24 (7) -8) 146.5, para la pelea a 10 rounds, en la división wélter.

A diferencia de la conferencia final, el jueves, en la que también se encendieron los ánimos, esta vez Joseph JoJo Díaz (28 (14) -1) y el nicaragüense Freddy Fonseca se comportaron correctamente. El centroamericano libró la romana con el límite de la división pluma y Díaz media libra debajo de las 130.

Para el duelo donde unificarán los títulos Internacional superpluma OMB y el NABO, el estadunidense Lamont Roach Jr. (18 (7) y un empate) cumplió con 129.5 libras, mientras el puertorriqueño Jonathan Oquendo (35 (19) -5) marcó 130.

Para el pleito por el título mundial interino supermediano de AMB, el australiano Bilal Akkawy (20 (16) y un empate) y el británico John Ryder (27 (15) -4) marcaron idéntico 167.5 libras.