Aunque en los próximos años se mantuvieran bajas expectativas de crecimiento, hay condiciones para que el salario mínimo ronde los 300 pesos en 2024, sostuvo el presidente de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami), Andrés Peñaloza Méndez, aunque precisó que para quienes perciben otro tipo de salario, los incrementos siguen dependiendo de la productividad de la empresa en la que laboren y la economía nacional.

Tras asistir a la entrega de reconocimientos a empleados del Instituto Fonacot, en el contexto del 45 aniversario del organismo, Peñaloza indicó que con el actual salario mínimo de 102.68 pesos se alcanzó la línea de bienestar individual, pero aún falta lograr la del bienestar familiar.

La Conasami cuenta con cuatro posibilidades del comportamiento del salario mínimo, analizados durante el debate para elaborar el Plan de Nacional de Desarrollo. Uno de ellos plantea un escenario cercano al que propuso esta semana la Confederación Patronal de la República Mexicana, que señaló que para alcanzar la línea de bienestar familiar se debe fijar en 2024 un salario mínimo de 293 pesos diarios.

En los meses recientes, distintas calificadoras internacionales e incluso la Secretaría de Hacienda han ajustado a la baja las expectativas de crecimiento económico. Peñaloza afirmó que ello se debe a la desaceleración económica a escala global, y cuando pase esta fase es muy posible que sí lleguemos a tasas de crecimiento del orden de 4 por ciento.

Esto permitirá que lleguemos incluso a niveles que se tuvieron en 1976, el año en que el salario mínimo tuvo su mayor nivel adquisitivo. Esto, a precios actuales, es del orden de 360 pesos. Pero sí hay un abanico posible cercano a los 300 pesos, o 360, si es posible, tal vez un poco más, indicó.

Recalcó que se han registrado momentos de crecimiento económico en el país pero de gran desigualdad social, por lo que no necesariamente ambos temas van ligados al salario mínimo. “Incluso en un escenario –que nadie desea– de lento crecimiento, es posible llegar a los niveles de 1976 o a los de bienestar familiar”, insistió.