El Partido Acción Nacional (PAN) aseguró ayer que la meta de crecimiento de 6 por ciento del producto interno bruto (PIB), previsto en el Plan Nacional de Desarrollo, no es realizable si el gobierno federal no corrige las malas decisiones tomadas en materia económica, social y de seguridad pública. Por su lado, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) sostuvo que el proyecto es absolutamente fantasioso y un sueño guajiro, pues plantea soluciones irrealizables.

Marko Cortés, dirigente del blanquiazul, expuso que la meta de crecer a 6 por ciento es irrealizable si no se reactivan el aeropuerto de Texcoco y las zonas económicas especiales y si no se controla el gravísimo problema de inseguridad que se está padeciendo, que también ahuyenta la inversión y el turismo.

De gira por Quintana Roo, insistió en que la cancelación del aeropuerto significó tirar a la basura mil 500 millones de pesos y dio pésima señal a los inversionistas del mundo de que en México se puede cambiar de política económica de un día a otro.

A su vez, Ángel Ávila, integrante de la Dirección Nacional Extraordinaria del PRD, aseguró que el plan no genera las condiciones adecuadas para la inversión privada ni los mecanismos para propiciar el crecimiento económico.

Consideró que la cancelación del nuevo aeropuerto, el combate al huachicoleo, la carencia de políticas económicas y sociales, así como la violencia, han provocado desconfianza en el país.

Calificó de irrisorio e irrealizable lo anunciado por el mandatario federal, quien aseguró que habrá crecimiento económico anual de 6 por ciento y promedio sexenal de 4 por ciento, pues hasta el momento no existe una estrategia económica para el país y se enfrenta el decrecimiento del PIB.