Chilpancingo, Gro., Indígenas de las regiones Montaña y Costa Chica de Guerrero se manifestaron este lunes frente al palacio de gobierno del estado para exigir proyectos productivos urgentes debido a que en algunos municipios la caída del precio de la goma de opio ha agravado la pobreza.

En entrevista, Amador Cortés Robledo, miembro de la dirigencia del Consejo Indígena Popular de Guerrero Emiliano Zapata, explicó que esta situación obligó a decenas de pobladores a abandonar sus comunidades porque en la mayoría de los casos no tienen que comer y tampoco hay empleo.

Sostuvo que numerosos poblados indígenas sobreviven de la siembra de enervantes, pero hoy nos vemos obligados a salir de nuestras comunidades. En la zona de la Montaña-Costa ya existe hambruna, principalmente en los municipios de Atlamajalcingo del Monte, Chilapa, José Joaquín de Herrera, Tlacoapa, Malinaltepec, y en la parte alta de San Luis Acatlán, por mencionar algunos casos.

Cortés Robledo señaló que debido a la fumigación de cultivos de amapola se han envenenado ríos y montes. La crisis está latente y los pueblos luchan por subsistir. Por eso venimos a buscar al gobernador (priísta Héctor) Astudillo Flores.

Agregó que el mandatario debe autorizar el plan de desarrollo que promueven cientos de comisarios ejidales preocupados por el rezago de sus comunidades. Indicó que se demandó al funcionario medicinas, construcción de hospitales,y sobre todo que envíen médicos, maestros y fertilizantes a las regiones de la Montaña y la Costa Chica.

Mencionó que los indígenas inconformes llegaron de los municipios de José Joaquín de Herrera, Copanatoyac, Atlamajalcingo del Monte, San Luis Acatlán, Acatepec y Chilapa, entre otros, donde se asientan alrededor de 200 pueblos nahuas, mixtecos, tlapanecos y afromexicanos que están exigiendo atención de los tres niveles de gobierno. En la zona Costa-Montaña la miseria está latente. Lo mejor sería que atendieran muestras demandas antes de que sea demasiado tarde.