Aunque hoy el Sindicato Independiente de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (Situam) realizará diversas asambleas seccionales y su Comité de Huelga sesionará, con el objetivo de analizar las propuestas presentadas por las autoridades para resolver la huelga, no hay indicios de que la representación de los trabajadores modifique su demanda de 20 por ciento de aumento salarial frente a la oferta de 3.35 por ciento de la institución.

Incluso, persiste el enojo de un amplio sector sindical, no sólo por la presencia del rector general, Eduardo Peñalosa Castro, en un mitin antihuelga convocado por un grupo de académicos y de profesores distinguidos el jueves pasado en el Zócalo capitalino, sino también por su mensaje provocador pronunciado en ese acto, en el cual identificó al enemigo dentro del Situam.

Delegados de varias unidades académicas ya han expresado las dificultades económicas que enfrentan los trabajadores de base por no recibir sus salarios durante casi ya tres meses de huelga, pero insistieron que ésta se ha prolongado por la falta de sensibilidad de las autoridades, quienes se han negado persistentemente a hacer una redistribución del ingreso universitario y a reducir los elevados montos que se otorgan a bonos y estímulos.

Además, dijeron que ese problema lo tienen los trabajadores de base –sindicalizados o no, administrativos o académicos–, pues todo el personal de confianza y directivos de la UAM, incluidos los rectores general y de unidades, están cobrando su salario de manera regular, por lo que ellos, al parecer, no tienen ninguna prisa por resolver la huelga que este lunes cumple 86 días.

El secretario general y el abogado general de la institución, José Antonio de los Reyes y Rodrigo Serrano, respectivamente, señalaron que el paro no ha afectado el pago de salarios al personal de confianza, pues legalmente sólo afecta las relaciones laborales con el sindicato.