El único remero que entrenaba solo y pagaba sus competencias, Patrick Loliger, se retira este año y tiene planeado hacerlo de una manera especial con un tour y luego emprender el desafío de clasificarse a los Juegos Olímpicos de Invierno Pekín 2022, en la prueba de esquí nórdico, por lo que se preparará en Vancouver.

Los proyectos están contemplados, refiere el dos veces olímpico en justas veraniegas y ganador de ocho medallas en Juegos Panamericanos; “es un sueño que tengo y me ha encantaría ser el primer mexicano en dos justas distintas

Tenía que cambiar mi vida y durante años busqué patrocinios para pagar mis competencias, tener las mejores embarcaciones y la verdad sale caro, señala Loliger a la espera de que se abran las puertas para costearse sus planes.

Su despedida comenzará en septiembre en la pista de Cuemanco, lugar donde entrenó y compitió como seleccionado nacional durante más de dos décadas.

Mi despedida será en los lugares más bonitos de México, porque tocará Puebla, Veracruz, Chiapas, Yucatán y Quintana Roo. Quiero terminar en la laguna de Bacalar, será una semana y media, para finalizar en octubre. He remado en 34 naciones. Nuestro país, sobre todo la parte cultural, es maravilloso, platica Loliger Salas, quien también combina el triatlón y en sus ratos libres se dedica a su fundación altruista para ayudar a perros de la calle.