El Congreso de la Ciudad de México pidió a la titular de la Secretaría de Salud capitalina, Olivia López Arellano, gestionar que médicos legistas sean comisionados a los Centros de Justicia para las Mujeres, en tres turnos, con el equipo necesario para hacer revisiones médicas y ginecológicas de rutina que aseguren una atención pronta, oportuna y de calidad, además de facilitar que las certificaciones se integren a los expedientes de las víctimas de violencia física o abuso sexual.

La diputada Esperanza Villalobos Pérez, de Morena, explicó al presentar su propuesta al pleno que la ciudad cuenta con tres centros en Azcapotzalco, Iztapalapa y Tlalpan, en los que se concentran servicios institucionales especializados que facilitan el acceso a la justicia, la protección legal y la recuperación física y sicológica de mujeres víctimas de violencia, y el objetivo del exhorto es reforzar su capacidad de atención.

En la sesión, el pleno aprobó además que el Legislativo desarrolle una campaña para difundir los protocolos de actuación para la atención a mujeres víctimas de violencia, junto con la Procuraduría General de Justicia y la Secretaría de las Mujeres.

Esto, luego de un prolongado debate en el que legisladoras de Morena acusaron a los diputados del PAN de pretender invisibilizar las acciones que realiza el gobierno capitalino para combatir la violencia hacia las mujeres y mejorar la atención a las víctimas que acuden a denunciar al Ministerio Público.

Golpear a instituciones

La propuesta original, del diputado del PAN Damián von Roehrich, acusaba en sus resolutivos que dichos protocolos o no existían o son desconocidos por el personal de la dependencia, a lo que Valentina Batres Guadarrama, de Morena, anticipó que su bancada lo votaría en contra al advertir que más que un discurso de compromiso con el tema, las omisiones o falta de conocimiento del legislador sobre los protocolos evidenciaban que no tenía otra finalidad que la de golpear a las instituciones, a las personas que las presiden.

En el debate, Von Roehrich y su compañero de bancada Jorge Triana Tena increparon al presidente de la mesa directiva, Jesús Martín del Campo, del PT, por permitir a Batres el uso de la tribuna cuando ésta lo solicitó al haber sido aludida en su réplica, al argumentar los panistas que no habían dicho su nombre, sino sólo se habían referido a la diputada de Morena que me antecedió en la tribuna, lo que la morenista aprovechó para evidenciar sus actitudes machistas: se pintan solitos. Pero miren, los agresores suelen también evadir sus agresiones y lo hacen invisibilizando a las víctimas.

Al final, el panista cedió para que los resolutivos del exhorto se modificaran, quedando en una petición de información a la PGJ sobre la aplicación de los protocolos y la campaña de éstos mismos.