Martes 23 de abril de 2019, p. a12
Monserrat Alarcón no pudo sostener por mucho tiempo el título mosca de la Organización Mundial de Boxeo que ganó en Japón en 2017. Era un cinturón tres divisiones arriba de la que estima es natural para ella y fue a disputarlo a una plaza a la que consideran complicada por la parcialidad de los jueces hacia los peleadores locales.
Me dijeron que en Japón hay casi que matar a los locales
, cuenta Monserrat. En realidad lo que la motivaba para emprender ese viaje, además de convertirse en campeona, por muy disparatado que resultara, era conocer ese país. Un anhelo turístico la convirtió en monarca en abril de 2017, cuando le arrebató el título a Nana Yoshikawa.
Sólo pudo hacer una defensa porque cuando enfrentó a la retadora, Arely Muciño, de amplia trayectoria y mosca natural, en febrero de 2018, no pudo conservarlo.
Creo que me pesó demasiado el nombre de Arely Muciño
, cuenta Monserrat; ella ya tenía una trayectoria y eso me intimidó, más que la desventaja física. Y en la esquina que tenía creo que no supieron apoyarme para sentir seguridad y que estuviera con mayor fortaleza mental
.
Cuando le ofrecieron pelear por el título de la Asociación Mundial en peso átomo, poco conocido en México, pero que en Asia ya tenía prestigio, no titubeó. La categoría le resultaba natural, se movía con comodidad y su peso y estatura no la dejaban en desventaja. Lo ganó ante Mayela Pérez en septiembre de 2018.
Fui la primera mexicana en ganar un campeonato en peso átomo en el mundo
, cuenta Alarcón; muchos decían que era una categoría inventada, pero hacía tiempo que se disputaba en Asia. Hoy ya todos los organismos la consideran y las mexicanas estamos destacando
.
Alarcón hizo su primera defensa con éxito ante Nora Cardoza; quiere exponer el título varías veces y buscar a las campeonas de otros organismos. Hay que darle protección a la categoría porque se cobra muy por debajo de lo que pagan en mosca, que ya de por sí es poco
, explica.