La hemofilia es una enfermedad hemorrágica y hereditaria que impide la coagulación de la sangre, por lo general la padecen los varones y la mujer es transmisora sin presentar el cuadro clínico; los casos en ellas son menos de uno por ciento, informó Jaime García Chávez, hematólogo de pacientes adultos de la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) del Centro Médico Nacional La Raza.

En la conmemoración del Día Mundial de la Hemofilia, destacó que en México hay registros que indican la existencia de una población de más de 6 mil pacientes con hemofilia, padecimiento que se hereda en el cromosoma X de la mujer, quien al tener dos cromosomas, uno sano y otro enfermo, no la padece. Sin embargo, en 30 por ciento de los casos aparece como una mutación nueva, es decir, que los padres no la padecen.

Agregó que existen diferentes tipos de hemofilia según el factor de coagulación que haga falta al paciente. Hay casos en que no es tan grave y los pacientes se enteran en la edad adulta y se les diagnostica a los 60 o 70 años cuando tienen heridas muy leves porque en su vida casi no sangraron.

Sin embargo, 60 por ciento de los casos son graves. En estos pacientes el sangrado suele ser prolongado y las hemorragias se presentan en cualquier parte del cuerpo: articulaciones, cerebro, ojos, garganta, riñones e incluso llegan a presentar digestivas.

Detección temprana

En tanto, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) señaló que cuenta con avances en tratamientos de profilaxis para la hemofilia prescritos desde edades tempranas y de por vida.

Ana Martínez Ríos, hematóloga del Hospital Regional Ignacio Zaragoza, indicó que los primeros signos de la hemofilia se registran a temprana edad, cuando un bebé requiere una vacuna, al realizar el tamiz neonatal o lo inyectan, es entonces que el problema de coagulación se pone en evidencia, pues la pequeña punción de la aguja ocasiona que siga saliendo sangre muy lentamente por goteo, durante horas.

Una de las complicaciones más frecuentes que genera la hemofilia severa es la hemartrosis o hemorragia articular en rodillas, tobillos y codos; este sangrado es interno, por lo que ocasiona inflamación, calor, dolor, deformidad y también discapacidad.