El memorando firmado por el presidente Andrés Manuel López Obrador por el cual ordenó suspender la implementación de la reforma educativa, puede ser una medida adecuada ante la incapacidad del Congreso de encontrar otra salida, afirmaron especialistas en el sistema educativo nacional, quienes también reconocieron que representa una muestra del rotundo fracaso de los representantes legislativos y del gobierno federal de construir un acuerdo con todos los actores involucrados.

Ángel Díaz Barriga, del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), consideró que el documento es un mensaje al magisterio, pero también es un jalón de orejas a las fuerzas políticas en las cámaras del Congreso, incluida Morena, que han sido incapaces de construir acuerdos con el magisterio, al igual que el secretario del ramo, Esteban Moctezuma Barragán.

Explicó que la propuesta de López Obrador es clara: Hay un compromiso de campaña que quiere cumplir, porque tiene 30 millones de votos que lo avalan, pero también muestra la incapacidad del resto de los actores, incluido el magisterio, por construir un mejor acuerdo.

Al respecto, César Navarro Gallegos, historiador y experto en temas educativos del Instituto José María Luis Mora, destacó que el error de origen del gobierno federal no sólo fue ceder en mantener temas laborales en el artículo tercero constitucional, sino en los funcionarios federales que fueron nombrados al frente de las instancias responsables de construir el acuerdo por la educación, lo que incluye a Moctezuma Barragán, pero también a los viejos políticos priístas que encabezan las cámaras en representación de Morena.

En entrevistas por separado, señalaron que el memorando suscrito por el Ejecutivo federal no representa un avance ni una salida a la falta de consensos y a la necesidad de construir otra alternativa, pero deja en evidencia a las fuerzas políticas, porque si por esta vía no avanza, pues busquemos otra.

Díaz Barriga recordó que el gran error de técnica legislativa de la reforma educativa del sexenio pasado fue dejar el tema laboral del magisterio en el artículo tercero, y eso le está costando mucho al país. Si se eliminara, se facilitaría mucho el consenso. Advirtió que México no aguanta otro sexenio de marchas magisteriales, y el sistema educativo tampoco.

Navarro Gallegos insistió en que el texto es reflejo de un gobierno que ha sido incapaz de llegar a acuerdos y, peor aún, que propone en su memorando acciones, como la contratación de los normalistas egresados, sin mencionar que no sólo hay miles de jóvenes formados en las escuelas normales que esperan un espacio, también de instituciones como la Universidad Pedagógica Nacional y de muchas facultades vinculadas a la educación, quienes también deben ser considerados.