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Prevenir embarazo adolescente debe ser prioridad: académico
 
Periódico La Jornada
Martes 16 de abril de 2019, p. 34

México es el país miembro de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) con más adolescentes embarazadas, lo cual, entre otras cosas, representa un importante problema de salud pública.

Mario Tapia, académico de la Facultad de Estudios Superiores Zaragoza, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), explicó que, desde el punto de vista clínico, este tipo de gestaciones regularmente están relacionadas con la mortalidad materna por preclampsia, diabetes gestacional, hemorragias uterinas, desnutrición, inmadurez y bajo peso de los bebés.

En 2018 la tasa fue de 77 adolescentes embarazadas por cada mil jóvenes de 15 a 19 años, y la edad de inicio de las relaciones sexuales, en 23 por ciento de este segmento fue entre los 12 y 17 años.

Por ello, el especialista, cuyo trabajo se enfoca en el estudio médico integral de la familia y epidemiología clínica, señaló que la prevención de estos embarazos debe ser prioridad no sólo porque México es el país de América Latina con más casos y porque es un indicador de desarrollo, sino esencialmente por sus efectos en la salud de los madres y los bebés.

Además, dijo, las jóvenes a esa edad no están preparadas emocionalmente para hacer frente a la maternidad y pueden ser víctimas de violencia sicológica o física por la pareja o la familia.

De acuerdo con cifras de la Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes, en México, cada año jóvenes menores de 19 años dan a luz 340 mil veces y 15 por ciento de hombres, así como 33 por ciento de mujeres no utilizaron métodos anticonceptivos en su primera relación sexual.

El académico de la UNAM subrayó que es necesario que el Estado mexicano tome en cuenta variables de riesgo de tipo individual, social y familiar, involucradas en este problema.

La educación sexual no es exclusiva de la escuela y los centros de salud, sino que debe empezar en el entorno familiar, aseguró.

La familia debe proteger a sus miembros, transmitir la cultura del conocimiento, sobre todo, la socialización. Es ahí donde estamos fallando, insistió.