La instalación Actos de Dios, de Pablo Vargas Lugo, se verá del 11 de mayo al 24 de noviembre en la Sale d’Armi del Arsenale // Nada se pone en tela de juicio, sólo se escenifica la historia del texto bíblico para hacer lecturas alternas, adelanta su autor
Martes 16 de abril de 2019, p. 4
En la edición 58 de la Muestra Internacional de Arte de la Bienal de Venecia, el pabellón de México estará representado por la iniciativa Actos de Dios, de Pablo Vargas Lugo, quien pone en perspectiva el Nuevo Testamento, segunda parte de la Biblia, de tal forma que el público pueda reacomodar esa historia y hacer lecturas alternas.
La instalación de arte, con un costo de 12 millones de pesos, se mostrará del 11 de mayo al 24 de noviembre en el pabellón de México, ubicado en la Sale d’Armi del Arsenale, en esa ciudad italiana, propone releer la historia del Nuevo Testamento como un acertijo inacabado para obtener nuevas imágenes desde la imaginación. Vargas Lugo, quien presentó su trabajo en la sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes, explicó que Actos de Dios tiene como premisa ‘‘qué sucedería si pudiéramos de alguna manera volver líquida esa historia tan cristalizada que conocemos como el Nuevo Testamento”.
Sostuvo que mediante el lenguaje cinematográfico trata de resignificar una serie de aspectos en torno al texto que habla del mesías que viene a salvar a la humanidad y ha tenido parámetros de interpretaciones correctas e incorrectas.
‘‘Me interesa como artista revivir, examinar esta historia porque se basa en buena parte del lenguaje artístico de la tradición occidental y en segundo lugar porque creo que como autores contamos ya con un medio que permite introducir elementos de manera muy natural a las narraciones que vienen cargadas de significados y tienen mucho tiempo que es el lenguaje cinematográfico”, detalló Vargas Lugo.
Dejar el pensamiento sobre la vida eterna y la salvación
Actos de Dios consiste en una doble proyección, dos esculturas y una pista musical. La proyección consta de dos ediciones del material fílmico con secuencias diferentes realizado en el área natural protegida de Cuatro Ciénegas, Coahuila, y las piezas escultóricas ofrecen claves al espectador para interpretar lo que sucede en la pantalla.
Un tapete microbiano, una especie de reinterpretación de las formas de vida que se pueden encontrar en ese sitio complementa esta iniciativa artística.
La instalación de arte, con curaduría de Magalí Arriola, invita a reflexionar no sólo acerca de la noción de la fe como creencia religiosa, sino también sobre la manera en que nuestras convicciones se ven reflejadas –cuando no distorsionadas e instrumentalizadas– en el discurso político y el imaginario.
‘‘Me interesa –explicó Vargas Lugo– visitar el mecanismo de estas creencias, de cómo nos identificamos con ellas y sus ramificaciones no sólo en lo religioso, sino en las culturas popular y política, cuando hablamos de un término de algo, de un gobernante con tendencias mesiánicas, pues esa palabra tiene resonancia religiosa. Ese es el interés, identificar las ramificaciones políticas en la cultura popular, religión y mitologías del mismo tema.”
Aclaró que ese trabajo no es una parodia ni pone en tela de juicio nada, simplemente escenifica la historia del texto bíblico de una manera que permita reacomodarla y obtener lecturas alternas y si fuera posible enseñanzas nuevas que nos saquen de esa inercia de nuestro pensamiento sobre necesidad de vida eterna y salvación.
De acuerdo con el artista, el mesías deviene un personaje más en la narración y se involucran otros elementos importantes del paisaje de Cuatro Ciénegas, zona que contiene formas de vida que datan de miles de millones de años.
En opinión de Magalí Arriola, la obra de Vargas Lugo ‘‘más allá del contexto bíblico es una narrativa que nos toca a todos, sociedad y políticos”. Consideró que el texto del Nuevo Testamento es ‘‘una historia extremadamente manipulada y utilizada a veces para bien y otras para mal”.
El curador general de la Bienal de Venecia, Ralph Rugoff, planteó que para esta edición la noción curatorial gire en torno a la actualidad como un tiempo de incertidumbre, crisis y agitación; esto tomado de la expresión en inglés May you live in interesting Times (Que vivas en tiempos interesantes), que por mucho tiempo ha sido erróneamente interpretada como una antigua maldición china para invocar periodos como el que vivimos.