Lunes 1º de abril de 2019, p. 6
No esperaba que fuera tan breve. Apenas dos episodios de combate en los que Eduardo Rocky Hernández noqueó a un oponente sin resistencia, el tanzano Ibrahim Class, quien después de dos caídas, terminó apabullado y contraído. El debut en Estados Unidos salió como lo había imaginado el mexicano.
Un día después, desde Los Ángeles, Rocky todavía trata de asimilar el triunfo de anoche, no especula sobre el futuro, pero entiende que por fin ha llegado a los escenarios donde su carrera puede cobrar otra dirección.
Esto puede significar un salto en mi carrera
, dice el peleador de 21 años, dependerá de cómo me promuevan, pero este tipo de oportunidades pueden cambiar tu vida
.
El año pasado Rocky tuvo que sobreponerse a varios imprevistos. Un asalto en el que fue baleado y estuvo en riesgo de perder movilidad en una pierna. Después ganó el derecho para una eliminatoria por el campeonato mundial superpluma ante Francisco Bandido Vargas; nunca ocurrió, el adversario consideró que no era una pelea lucrativa y los descartó.
Hoy todo es distinto y mi debut internacional fue con el pie derecho
, dice Rocky; me habría gustado que la pelea fuera más espectacular; no salí a buscar el nocaut y llegó solo, pero la verdad que sí esperaba más de Class
.
Rocky se quedó con ansias de más pelea. Aún así, sintió el apoyo de la gente y el respaldo de Golden Boy, la empresa que lo promovió en Estados Unidos.