Una toma clandestina en el municipio de Tlahuelilpan, Hidalgo, causó la mañana de este domingo una fuga de gasolina que personal de Petróleos Mexicanos (Pemex) tardó dos horas en controlar. El chorro de combustible alcanzó una altura de casi 20 metros.

La empresa productiva del Estado informó que la fuga fue detectada a las 8:45 horas en un campo de cultivo ubicado en el camino que une la cabecera de Talhuelilpan con el poblado de Juandhó, municipio de Tetepango.

En esta ocasión ningún poblador acudió a tratar de robar combustible, a diferencia del pasado 18 de enero, cuando ocurrió una explosión que ha dejado 135 muertos.

La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó, en tanto, que ayer fueron detectadas 20 tomas clandestinas y se decomisaron más de 14 mil litros de combustible en Hidalgo, estado de México y Guanajuato.

En la primera entidad, la Sedena localizó una toma clandestina con fuga de gasolina en Tlahuelilpan cuando patrullaba el poliducto Tuxpan-Tula. No hubo detenidos.

En tanto, policías federales ubicaron nueve válvulas ilegales en el municipio de Atotonilco de Tula y tres en las demarcaciones de Tepeji del Río y Tula de Allende.

En Ecatepec, estado de México, personal de la Secretaría de Seguridad reportó que en la colonia Santa Clara Coatitla localizó un inmueble donde había varios vehículos y contenedores de 200 y mil litros con hidrocarburo robado.

A su vez, la Sedena detalló que fueron inhabilitadas seis tomas clandestinas en los municipios de Cuautitlán de Romero Rubio, Toluca, Huehuetoca e Ixtlahuaca, y que en la carretera Huehuetoca-Apaxco los soldados detuvieron un tractocamión con un semirremolque de tanque después de que el conductor no pudo acreditar la procedencia de casi 12 mil 600 litros de hidrocarburo.

Cerca de Silao, Guanajuato, los militares localizaron una perforación ilegal; en León, un vehículo robado que transportaba 500 litros de combustible, y cerca de un canal aseguraron dos depósitos con 360 litros de hidrocarburo.