Ecos del Vive
ecuperados de la euforia y el cansancio vivido en el Vive Latino, escuchamos/leímos la opinión de centenares de conocedores –adjetivo respetuoso y merecido en la mayoría de los casos–. Algunos comentarios los rescatamos de espacios periodísticos y la mayoría de las redes sociales. La neta, hubo pocas quejas, la mayoría fundamentadas. Eso fue lo chido. A nosotros, durante el festival, nos dio gusto estar entre sonrisas y la buena onda lanzada por casi todos los asistentes: hasta en las largas filas para entrar al baño de mujeres, las chavas hacían bromas de la situación. Y por cuestiones generacionales y por conocer nuevas propuestas fuimos a dos-tres presentaciones no estelares. Dos conciertos fueron muy emotivos en el Escena Indio: el primero fue de Óscar Chávez, quien abrió su recital con la canción Mariana; posteriormente, en modo El Estilos, Óscar se echó a dúo con Dr. Shenka, Fuera del mundo, rola rescatada de la película Los Caifanes. Al finalizar, Dr. Shenka le dijo al autor de Por ti: Vine a rendir tributo al maestro Óscar y mucho amor de parte del rock mexicano
. En el mismo escenario, los integrantes varones –fue la onda ver a Álex Otaola y a Pablo Valero juntos– recrearon sonoridades de Santa Sabina; al final invitaron a Jessy Bulbo, Amandititita y a Rubén Albarrán a saborear Chicles, Denise Gutiérrez cantó una versión de Estando aquí no estoy con la presencia omnipresente de Rita Guerrero en el escenario.
Antes, fuimos a conocer a LP, Laura Pergolizzi, cantante con muchos seguidores entre la nueva banda roquera, quien convocó a un buen de espectadores al escenario Doritos, que esperaron Lost on you para silbar y disfrutar de la imagen retro de la cantante estadunidense. Ahora cabe una reflexión: ¿cómo harán los promotores para superar cartel y asistencia el próximo año? Ahí se la dejamos.
En terrenos choperos grabaciones de rock mexicano
De regreso a lo habitual, donde lo insólito existe siempre, empecemos con música en vivo: este mediodía, en Radio Chopo se escuchará blues, funk, garage y, en general, rock con diferentes matices expresado por media docena de bandas: de Tlane, llega La Gorda Soledad –así se llama el grupo–; de Guanatos le caerá Dinamo; de acántaros, Hombre Bala, Wani y War Horses, y del barrio Manrique, de Medellín, Colombia, debuta el cuarteto Nepentes. Entrada libre, horario de 11 a 15 horas.
Por otro lado, el domingo pasado La Pingo’s Orquesta tocó en el Vive Latino para presentar algunas canciones de su epé, Música para domar monstruos, de donde salió El dolor no es para siempre, canción que permeó en el ambiente de la Carpa Intolerante. Pero, al mismo tiempo, este sexteto, originario de la ciudad de Aguascalientes, está en plena promoción de su álbum Peregrino, grabación con 12 cortes de donde se desprenden La huida, Vértigo y Mordiendo clavos, temas que ya rotan en plataformas digitales. Lo anterior es para apoyar la campaña #hagamosparo compra discos de rock mexicano.Y si es en el Tianguis del Chopo, mejor. Salú.