La comunidad de creadores tiene razón al exigir claridad, eficiencia y certeza en el diseño e implementación de las políticas públicas, reconoce el subsecretario de Desarrollo Cultural de la Secretaría de Cultura federal, Édgar San Juan Padilla.

A propósito del ‘‘desencuentro” del pasado 7 de marzo, cuando el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca) citó a un diálogo abierto con artistas, becarios y autoridades, y la reunión terminó entre gritos y reclamos, el funcionario acepta que el detonador fue la ausencia del entonces director de esa instancia, el escritor Mario Bellatin, ‘‘quien no pudo asistir por motivos de salud”.

En entrevista con La Jornada, San Juan (Ciudad de México, 1970) explica que ‘‘el Fonca no había sido totalmente claro en su comunicación y en dar certeza en cómo iban a avanzar los programas. Lo que fue una oportunidad idónea para tener una mesa de diálogo se convirtió en otra cosa, en un foco rojo, pero la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto, hará anuncios al respecto, se va a escuchar a la comunidad”.

El subsecretario de Desarrollo Cultural se refiere a la llegada al frente del Fonca de Marina Núñez Bespalova, luego de la renun-cia de Bellatin, también por motivos de salud.

Gobernar obedeciendo

Édgar San Juan insiste en que es una asignatura pendiente el diálogo con la comunidad y el Fonca, la cual ‘‘es enorme, es el alma de la Secretaría de Cultura, ahí está en el ADN de la institución porque el Fonca justo nació con el Conaculta y es una instancia semilla, que ha servido de referente para conformar otras instituciones en otros lugares del mundo.

‘‘Por eso, lo que se demostró con el encuentro del 7 de marzo fue la importancia de mantener un diálogo, pues hay que gobernar obedeciendo, como dice el Presidente.

‘‘Cuando estuve del lado de los creadores, no entendía por qué en la administración pública pasaba que el burócrata en turno tenía la ocurrencia de cambiar todo. Ahora que estoy de este lado, puedo decir que el cambio sí es en serio, es decir, escucharemos a las personas para con ellas cogobernar.

‘‘Siempre, antes de tomar pasos en cada dirección, consultaremos con la comunidad para decidir juntos. Habrá veces en que tengamos éxito y avanzaremos, moldearemos las instituciones que los ciudadanos y los creadores necesitamos, tendremos éxito o nos equivocaremos, pero juntos, estamos ya en ese nuevo modelo de administración publica, cambiamos el paradigma.”

Insistió en que la restructuración que deba hacerse al Fonca no afectará a ningún becario ni programa que esté funcionando.

‘‘Debemos escuchar también a los creadores de todo el país, a las mujeres, a los que hablan otras lenguas, a quienes han sido discriminados por su preferencia sexual, por su entorno socioeconómico; por eso debemos esperar las consultas en zonas que tradicionalmente no han sido escuchadas”, añadió.

▲ Los principales cambios en la política cultural se comenzarán a incorporar en el último trimestre del año, adelanta a La Jornada Édgar San Juan Pineda (con su mascota, Soller).Foto Cristina Rodríguez

Édgar San Juan estudió ciencia política, antes de dedicarse al cine como guionista, productor y maestro en el Centro de Capacitación Cinematográfica.

Sostiene que la mayoría de los artistas y creadores en el país, ‘‘al tener el superpoder de ver la realidad y reinterpetarla para expresarla y comunicarse con la sociedad, consideran pertinente un cambio. Quizá existan quienes no deseen salirse de su zona de confort para seguir jugando en los mismos patios de recreo, pero hay a quienes nos duele mucho la desigualdad. México es un país que duele tanto que, por eso, acepté estar aquí y me la voy a rifar.

‘‘Me hace ilusión redefinir el concepto de servidor público, el cual se denigró por las administraciones pasadas. Quiero contribuir a revalorar este trabajo, comenzando por colaborar con la ciudadanía, no como los corruptos y sanguijuelas que se nutrieron del bienestar de la sociedad, no como los que usaron los privilegios para unos cuantos.

‘‘Nosotros tenemos que ser los primeros en brindar una vocación de servicio, y demostrar que el poder es bueno cuando sirves a las personas. Mi misión es servircomo un puente entre la comunidad de creadores y el Estado con el fin de brindar las condiciones para que aquéllos puedan dedicarse a contribuir y hacer de México la potencia cultural a la que aspiramos.

‘‘Quiero propiciar que muchas personas que han sido marginadas por las políticas culturales puedan acceder a ella, como creadores y como audiencias, porque el arte y la cultura son calidad de vida.”

Invertir en los creadores

Respecto de los recortes de personal en la Secretaría de Cultura, San Juan dijo que esa dependencia ‘‘estaba un poco obesa en términos de empleados, había duplicidad de funciones y, al menos en esta subsecretaría, quienes estaban acostumbrados a hacer las cosas de tal manera que no podían agarrar el flujo de trabajo planteado.

‘‘Lo más fácil habría sido seguir con el mismo barco y no generar olas, pero creo que la ciudadanía votó por otra cosa. Vamos a invertir los recursos en los creadores, en las audiencias, y no en burocracia.”

Los principales cambios en la política cultural en el país se comenzarán a incorporar en el último trimestre del año ‘‘para que tengan impactos definitivos en la implementación de políticas públicas de 2020.

‘‘Nuestra función es administrar los recursos escasos, pero al ser México una potencia cultural, creo que será fundamental incrementar paulatinamente el presupuesto destinado a la cultura, por ejemplo, a través de las economías creativas y de modelos de economías de escala que puedan funcionar para generar mayores oportunidades de bienestar y riqueza para los creadores”, concluye el subsecretario.