Rectifican cifra de muertos: son 23
Sábado 9 de marzo de 2019, p. 13
Tras la muerte de 23 centroamericanos en un accidente carretero en Chiapas, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, indicó que la nueva política migratoria está perfilada para que las personas en situación de movilidad no deban viajar en situaciones precarias.
Los hechos se registraron en el tramo carretero de Tuxtla Gutiérrez-Chicoasén, con saldo de 23 muertos (13 varones y 10 mujeres) y 33 heridos. Entre los decesos hay un niño de tres años y otro de siete.
El canciller dijo que aún se desconocen las causas por las cuales el camión volcó y cayó en un barranco.
La fiscalía de Chiapas precisó que el accidente ocurrió en el tramo carretero Ixtapa-Soyaló-Chicoasén, en el norte de la entidad, cuando el camión de tres toneladas, marca Ford, tipo Super Duty, color blanco, sin placas de circulación y con caja seca, se salió de la carretera y volcó. El chofer se dio a la fuga apoyado por presuntos traficantes de personas que viajaban en otro vehículo.
Todos eran guatemaltecos
El ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala informó, a través de un comunicado, que los 23 eran originarios de su país.
Dos de los 33 heridos están graves y son atendidos en hospitales de la entidad; los 23 cadáveres se encuentran en el Servicio Médico Forense de Tuxtla Gutiérrez.
Los migrantes no traían entre sus documentos permisos ni tarjetas humanitarias temporales para permanecer en México, expedidas por el Instituto Nacional de Migración.
Según el testimonio de los lesionados, el grupo ingresó a México el 4 de marzo por el municipio de Frontera Comalapa; pasó por Comitán de Domínguez y San Cristóbal de Las Casas; tomó la carretera libre hacia el sitio conocido como El Escopetazo y luego se internó por la vía Ixtapa-Soyaló-Chicoasén, donde ocurrió el accidente.
La fiscalía chiapaneca investiga si los centroamericanos habían convenido o pagaron determinadas cantidades de dinero a traficantes de personas para ingresar y cruzar el territorio mexicano.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados advirtió que la falta de opciones legales para ingresar al territorio y el uso de la detención propician que las personas se vean obligados a viajar en la clandestinidad, tomando rutas peligrosas y exponiéndolas a diferentes tipos de riesgo.
La agencia de la ONU para los refugiados, representada en México por Mark Manly, dijo que muchas de las personas de los países de Centroamérica vienen huyendo de la violencia y la persecución en sus países de origen, y siguen enfrentando riesgos cuando cruzan la frontera mexicana.