Personal del Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) cerró ayer el puente internacional Santa Fe, que comunica a El Paso, Texas, con Ciudad Juárez, Chihuahua, por alerta de que una caravana de aproximadamente 200 cubanos pretendía internarse en ese país.

Los agentes bloquearon el puente con barricadas de concreto y malla metálica con navajas. Cuando un grupo de no más de 50 cubanos se acercó a los agentes para preguntar cuándo serían recibidos para solicitar asilo político, los uniformados les lanzaron gas lacrimógeno, y cerraron totalmente el puente.

Personal de seguridad privada a cargo de la vigilancia del puente en el lado mexicano explicó que la movilización de agentes fronterizos se dio porque un ciudadano de Estados Unidos aseguró a las autoridades de su país que una caravana grande llegaba al cruce internacional.

De acuerdo con policías federales mexicanos, los cubanos agredidos portaban pulseras de identificación de La Casa del Migrante de Ciudad Juárez.

Dijeron que el pasado 22 de febrero, elementos del CBP dispusieron barricadas de concreto en los puentes internacionales entre Juárez y El Paso, así como en otros sitios de Texas y California, debido a informes sobre el creciente número de migrantes que llegan, a quienes se pretende disuadir de ingresar por la fuerza a Estados Unidos.

En tanto, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio en Delicias, Chihuahua, Ramón Loya, pidió a la Secretaría de Seguridad Pública local impedir a indigentes y migrantes que pidan limosna en el primer cuadro de la cabecera municipal, para no exponer a la ciudadanía y mantener el orden necesario para los comercios.

Mientras, 575 migrantes, la mayoría centroamericanos, fueron alojados desde la noche del sábado en un albergue que el gobierno de Jalisco habilitó en el Parque de la Solidaridad de Guadalajara. La caravana se compone de 47 niñas, 77 niños, 110 mujeres y 341 hombres.

El sistema para el Desarrollo Integral de la Familia de Jalisco pidió a la ciudadanía donar a los albergados agua embotellada, alimentos no perecederos, detergentes y artículos de limpieza personal, para lo cual instaló un centro de acopio en el Foro del Parque de la Solidaridad. El gobierno estatal dijo ignorar qué ruta tomará la caravana de centroamericanos y por cuánto tiempo permanecerá en el albergue.