Escárcega, Camp., Desde el sureste, el presidente Andrés Manuel López Obrador llamó a no caer en ninguna provocación mientras transcurre la consulta para definir el futuro de la termoeléctrica en Huexca, Morelos, a tres días del asesinato del activista Samir Flores.

Lo mejor es que haya democracia, que haya votación y que sea la gente la que decida. No caer en ninguna provocación, señaló en breve entrevista, tras la entrega de apoyos del programa Crédito ganadero a la palabra, donde convocó a la unidad.

Acerca de si haría un llamado para que no se quemen boletas, después de que se registraron incidentes en comunidades de Morelos y Puebla, afectadas por el paso del gasoducto que, al igual que la termoeléctrica, son parte del Proyecto Integral Morelos (PIM), el Presidente respondió: La gente siempre actúa de manera responsable.

El mandatario visitó este sábado dos municipios del estado, donde reiteró que fue un fracaso la política económica llamada neoliberal. Por eso, para fuera esa política. Ya se va, se va, afirmó.

Dijo: los tecnócratas irresponsables, corruptos abandonaron el campo y obligaron a la gente a buscar la vida en otras partes, cuando la migración debe ser optativa, no obligatoria. Cuando uno se forma en un ejido, una ranchería, un pueblo, tiene una gran reserva de valores culturales, morales, espirituales... somos muy respetuosos quienes salimos de abajo de los pueblos, las comunidades, los ejidos.

Casi al mediodía, estuvo en el campo de beisbol Gabino Pérez, en Candelaria, acompañado por el gobernador Alejandro Moreno, la secretaria de Bienestar, María Luisa Albores, y el coordinador general de ganadería de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, David Monreal, para entregar apoyos a beneficiarios.

A su llegada, Cornelio Montejo y Julio Muñoz le regalaron al Presidente dos gansos, y el mandatario, para regocijo de la prensa, posó y acarició a las aves, que por un momento fueron liberadas y caminaron por unos segundos a su lado, hasta que elementos de la ayudantía se hicieron cargo de ellas. Fue el preámbulo para posicionar otra vez una de sus frases más festejadas: Me canso ganso!, ahora para subrayar que se va a acabar la corrupción.

Tanto en Candelaria, como en este municipio, las rechiflas alcanzaron al gobernador Moreno, por lo que López Obrador llamó a la unidad. “Mi pecho no es bodega y siempre digo lo que pienso, soy un poco deslenguado... me está apoyando el gobernador de Campeche, Alejandro Moreno, y de una vez les digo, ya no hay que estarnos peleando, hay que darnos la mano. ¿Qué se hace en los templos, qué se hace en la Iglesia? ¿No se dice: ‘Vamos a darnos la paz’?, pues eso es lo que se necesita ahora, la unidad, la reconciliación.

Ahora, si somos muy pleitistas y queremos pelearnos, vamos a pelearnos contra la corrupción, pero no a pelearnos nosotros. Somos hermanos y así nos tenemos que ver, subrayó.

En la feria local ganadera en Escárcega, el Presidente anticipó la posibilidad de que en este municipio se instalen los talleres del Tren Maya, con el cual se potenciará el desarrollo del sur-sureste del país y la posibilidad de conocer los centros ceremoniales y los centros arqueológicos. Calakmul, que está aquí relativamente cerca, es como el Nueva York de los mayas, es de lo más bello que hay, es algo excepcional, pero poco conocido, resaltó.

Consideró que a más tardar en un mes se lance la convocatoria para la licitación del tren, con una inversión de 120 mil a 150 mil millones de pesos.