La reforma a la Ley General de Salud para transformar el Seguro Popular está en proceso de construcción. Todavía no existe un proyecto formal porque se diseñará al mismo tiempo que avancen los acuerdos entre la Secretaría de Salud (Ssa) y los gobiernos de los estados para lograr la federalización del sector. El objetivo inmediato es poner de pie los servicios, lo que implica contar con el personal médico necesario, y que los hospitales y equipos funcionen, afirmó Ivonne Cisneros, titular de la Comisión Nacional de Protección Social en Salud (CNPSS).

Con ese fin, está en curso un diagnóstico de las plantillas de personal en ocho entidades del sur y sureste que participan en la primera etapa del Plan Nacional de Salud. También se realiza un censo de clínicas y hospitales para conocer su situación y las necesidades de infraestructura que tienen.

A la Secretaría de Hacienda y Crédito Público le corresponderá determinar de dónde provendrán los 25 mil millones de pesos comprometidos por el presidente Andrés Manuel López Obrador para subsanar las deficiencias y avanzar en el objetivo principal: garantizar el acceso efectivo a los servicios de salud, con base en la necesidad de las personas.

En entrevista, Cisneros señaló que mientras se construye el proyecto para transformar el Seguro Popular, para lo que no existe un plazo fatal pero seguro se hará, el esquema de aseguramiento seguirá funcionando como dice la ley, por lo que desde el pasado fin de semana, los servicios estata-les de salud empezaron a recibir las transferencias económicas.

Garantizan medicamentos

Explicó que dentro del marco legal se empezarán a realizar algunos cambios, como la primera compra consolidada de medicamentos para 22 entidades. Confirmó que los contratos tendrán vigencia de marzo a diciembre y se cubrirá la totalidad de necesidades de los participantes, sea porque no participaron en la compra liderada por el Instituto Mexicano del seguro Social (IMSS) o porque algunas licitaciones se declararon desiertas.

La titular de la CNPSS también confirmó que el dinero asignado a la compra de medicinas, equi-valente a 30 por ciento del total de los recursos del Seguro Popular, se seguirá depositando en las cuentas de la Tesorería de la Federación que tiene cada estado, pero la Secretaría de Hacienda se encargará de pagar a los proveedores.

También se modificará el mecanismo para que hospitales e institutos nacionales de salud cuenten de manera anticipada con los tratamientos para enfermedades de alto costo, con base en una previsión anual. Lo que ocurre ahora es que las instituciones deben invertir en la compra de los fármacos y después solicitan el rembolso a la CNPSS, lo que retrasa el acceso de los pacientes a las terapias.

La funcionaria comentó que el pasado jueves se llevó a cabo la reunión de la CNPSS con los secretarios de salud y los responsables de los Regímenes Estatales de Protección Social en Salud (REPSS). Llamó la atención sobre el hecho de que se trató de la primera ocasión en que se efectúa un encuentro de este tipo.

Ahí se firmaron los acuerdos de coordinación con los que formalmente inicia la operación del Seguro Popular. Así ocurre cada año, por lo que son falsos los señalamientos de que las clínicas y hospitales dejarán de prestar la atención médica gratuita en el primer y segundo nivel de atención.

Respecto de las enfermedades de alto costo cubiertas con el Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos, destacó que en diciembre se aprobó erogar más de 9 mil millones de pesos en 2019.