Martes 12 de febrero de 2019, p. 22
La cancelación de la cuarta subasta de largo plazo es negativa para el sector eléctrico, porque plantea dudas sobre el compromiso de México con la inversión en energías renovables y el futuro del financiamiento privado para nuevos proyectos energéticos, señala un análisis de la calificadora Moody’s.
El reporte indica que la cancelación, por el Centro Nacional de Control de Gas Natural, anunciada el mes pasado, coincide con un plan de la nueva administración para aumentar su dependencia de la generación convencional, incluyendo el gas natural doméstico y la hidroelectricidad.
Las tres primeras subastas en energías renovables agregaron una capacidad solar significativa a la red eléctrica de México, que comprendía sólo 0.28 por ciento de la capacidad total de la red al cierre de 2017. Los precios promedio de energía para las nuevas energías renovables fueron algunos de los más baratos en el mundo y los inversionistas privados que buscan oportunidades mediante la subasta agregaron estabilidad a la red eléctrica del país mediante la diversificación
, apunta el documento.
Advierte que la cancelación de la cuarta subasta y la eventual pérdida de contratos de energía adicionales de bajo costo corren el riesgo de tener repercusiones en la red eléctrica y en la Comisión Federal de Electricidad. De igua forma, en la permanencia de plantas más antiguas y menos eficientes.
Para el analista del sector de energía y electricidad Ramsés Pech, se requiere adaptar la actual infraestructura a tecnología más eficiente y reducir costos.
Dijo que actualmente la CFE enfrenta una desventaja en el mercado, debido a que tiene alta ineficiencia en generación de electricidad por los tipos de materia prima que utiliza para producir.