Sábado 9 de febrero de 2019, p. 7
La apertura de una serie de foros en el Senado para analizar el tema de la Guardia Nacional (GN) puede ser una buena oportunidad para escuchar nuevamente las voces de expertos y activistas y poner los filtros necesarios a dicha iniciativa, siempre y cuando las autoridades estén dispuestas a no hacer únicamente un ejercicio de simulación de democracia, afirmaron académicos e integrantes de colectivos de derechos humanos.
Raúl Ramírez Baena, director de la Comisión Ciudadana de Derechos Humanos del Noroeste, destacó que la realización de un ejercicio de parlamento abierto, a realizarse la próxima semana, es un logro del colectivo Seguridad sin Guerra –más que de los partidos de oposición– que debe aprovecharse para corregir los aspectos de la GN que provocan inquietud.
La mayoría de Morena en el Congreso tiene que escuchar y enmendar. El Presidente (Andrés Manuel López Obrador) puede tener su idea y su esquema (sobre la Guardia Nacional), pero tiene que respetar la división de poderes y que el Legislativo tenga sus propios criterios para decidir. Tienen que pesar más los argumentos que el empecinamiento
de crear dicho cuerpo de seguridad.
La apuesta está en el aire
Desoír los argumentos sólidos de las organizaciones no gubernamentales y de los organismos internacionales le provocaría un gran desgaste político al gobierno que quedaría exhibido por su falta de argumentos y de solidez en el proyecto de la seguridad pública militarizada. Habría un costo político por pagar
, recalcó el activista.
En tanto, Catalina Pérez Correa, profesora-investigadora del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), coincidió que los foros en el Senado serían un espacio interesante de análisis sobre el riesgo de continuar militarizando la seguridad pública, pero sólo en la medida en que los legisladores de Morena estén realmente abiertos al diálogo.
Es una buena oportunidad, siempre que estén dispuestos a escuchar y no pase como en la Cámara de Diputados, donde escucharon a una gran cantidad de expertos, pero los legisladores no cambiaron su decisión. Hicieron como que ya no iba a haber un mando militar, pero se quedaron con una propuesta que deja mucho qué desear
, lamentó la científica social.
Requisitos indispensables
De acuerdo con la especialista, los candados
mínimos que podrían establecerse en dichos espacios de análisis son eliminar el fuero de guerra para los miembros de la GN, establecer que el mando operativo de esa corporación esté integrado por civiles, y que haya un plazo definido para la desmilitarización paulatina de la seguridad pública.