Un total de 2 mil 324 centroamericanos abandonaron el estadio Jesús Martínez Palillo y en bloques se dirigieron a Cuatro Caminos para continuar su camino hacia Estados Unidos; quedaron en el albergue entre 400 y 500 personas, quienes buscan regularizar su situación migratoria.

La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, Nashieli Ramírez, señaló que con la cartilla que les entregará el Instituto Nacional de Migración, en tres o cuatro días, contarán con la posibilidad de acceder a un empleo y seguridad jurídica.

Comentó que esto no quita que no vaya a haber lo que se llama oleajes, pues la próxima semana se espera la llegada de otros 400 migrantes, quienes se encuentran en Veracruz, a los cuales se sumarían otros, que se ubican en puntos más alejados de la ciudad.

La administración capitalina apoyó su traslado con gratuidad en el Sistema de Transporte Colectivo Metro a Cuatro Caminos, donde la mayoría iniciaría su viaje rumbo a Piedras Negras, Coahuila; sólo se quedron algunas familias completas y hombres adultos mayores.

El cierre del albergue es decisión de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, y cuando ella diga que se cierra, se cierra, pues ya se tiene un protocolo muy armado, con una visión de seguridad, de respeto a los derechos humanos y de altos estándares, puntualizó.

Mencionó que de contar con un número menor de migrantes se buscarían otras alternativas, como sucedió el año pasado, lo cual se acordará en su momento con las autoridades capitalinas.