Jueves 31 de enero de 2019, p. 32
La insuficiencia presupuestaria, la defensa de la autonomía, un necesario aumento de la matrícula, los muy bajos niveles de eficiencia terminal y de titulación, y el mejoramiento de la vinculación con la sociedad, fueron algunos de los retos contenidos en la presentación de los programas de trabajo de los seis candidatos a la rectoría de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) unidad Azcapotzalco, para el periodo 2019-2023.
Junto a estos temas, estuvo también la necesidad de recomponer el tejido social
de la comunidad, dañado seriamente durante el prolongado y espinoso proceso de elección que ha tenido dicha unidad, prácticamente sin rector desde julio de 2017.
Cada aspirante, en orden alfabético, presentó su programa de trabajo y respondió a cuestionamientos de la comunidad universitaria: Raúl Arias Lovillo, ex rector de la Universidad Veracruzana de 2004 a 2013, que aunque fue profesor de la UAM-A en los 80, aparece como candidato externo; Francisco Cervantes de la Torre, Margarita Mercedes González Brambila; Homero Jiménez Rabiela; Óscar Lozano Carrillo y Abelardo Mariña Flores. Todos son profesores-investigadores de la UAM-A.
Los académicos presentaron su diagnóstico sobre los tres temas sustantivos de la vida universitaria: docencia, investigación y preservación y difusión de la cultura, con sus respectivas gestiones y programas que echarían andar en la UAM-A, que junto con Iztapalapa y Xochimilco es de las unidades fundadoras de esa casa de estudios, a la que se han sumado Cuajimalpa y Lerma, en años recientes.
La UAM-A atiende a una matrícula de más de 18 mil alumnos –un tercio del conjunto de toda la Universidad–, y una planta de mil profesores definitivos, 90 por ciento de ellos con posgrado. Sin embargo, registra apenas 17.3 por ciento de eficiencia terminal, muy por debajo del 45.4 de la unidad Xochimilco o del promedio nacional que ronda 50 por ciento, con altas tasas de deserción.