Entre 2017 y 2018, una decena de empresas distribuidoras de gas licuado de petróleo (LP), el energético que se consume en tres de cada cuatro hogares del país, compró dicho combustible a Petróleos Mexicanos (Pemex) con descuentos, lo que derivó en una merma para la empresa del Estado por 44 mil millones de pesos y cuyos beneficios no se vieron reflejados en el costo final al consumidor.

Pemex estuvo realizando ventas de primera mano por debajo del costo, ya que desde la reforma energética otorgó descuentos de hasta 2.61 pesos por kilo a al menos 10 compañías distribuidoras de gas LP, denunció el presidente de la Comisión de Energía en el Senado, Armando Guadiana, quien adelantó que solicitará a los legisladores que aprueben un dictamen para transparentar las operaciones.

Al cierre de septiembre del año pasado, el costo de primera mano por kilo de gas LP que se importa promedió 15.65 pesos, costo derivado del precio de referencia internacional Mont Belvieu más los costos de almacenamiento, traslado, seguros y costos de terminal, entre otros factores.

Tanto las empresas distribuidoras que realizan sus compras de primera mano a Pemex como las que le compran a empresas privadas importadoras, manejaron un precio promedio al consumidor final de 22.40 pesos por kilo en septiembre de 2018, apuntó la denuncia del legislador.

Pemex vendió de primera mano por debajo de su costo, ya que otorgó descuentos de hasta 2.61 pesos por kilo a ciertas empresas, sin motivo o alguna razón aparente, insistió el senador por Coahuila.

Pemex y empresas privadas importan el combustible a costos similares. Aproximadamente 65 por ciento proviene de la producción nacional y de las importaciones de Pemex, mientras el resto, 35 por ciento, son importaciones de empresas particulares.

Quien venda el producto a empresas distribuidores por debajo de su costo, es en detrimento de su propio patrimonio, apuntó el senador Guadiana en declaraciones hechas en la sede del Senado.

De acuerdo con sus estimaciones, Pemex dejó de percibir más de mil 500 millones de pesos por esos descuentos otorgados a empresas del sector. La empresa productiva del Estado vende en promedio 600 millones de kilos de gas LP mensualmente, así que por cada peso de descuento dejaron de ingresar 600 millones de pesos.