Los corredores de los ductos Tuxpan-Tula, Tula-Salamanca, Tuxpan-Azcapotzalco y Minatitlán-México, prácticamente tienen dueño. Informes de inteligencia, de los que La Jornada posee copia, identifican por lo menos a seis organizaciones en la ordeña de ductos.

En algunas están involucrados trabajadores de Petróleos Mexicanos (Pemex), en otras se relaciona a un presidente municipal panista, a policías ministeriales y empresas de los ramos del transporte y de combustibles.

Derivado de trabajos campo e inteligencia, el documento elaborado por la Policía Federal (PF) identifica a las organizaciones de Héctor Baltazar Osorio Delgado, La Parca; Melchor Ocampo, que lidera una célula del cártel Jalisco nueva generación; Roberto de los Santos de Jesús, El Bukanas; el cártel de Santa Rosa de Lima, que dirige José Antonio Yépez, El Marro; la de El Bárcenas, liderada por Carlos Bárcenas Jiménez, El Pelón, y la de Saúl Hernández Martínez, El Talachas, como saqueadores de ductos.

El documento al que se tuvo acceso, liga al alcalde de Tepetitlán, Hidalgo, Rodrigo Castillo Martínez, directamente con la organización de Bárcenas. De acuerdo con la estructura delictiva, ambos se ubican en la misma jerarquía.

Dicha organización opera en los poblados Sayula, San Mateo la Curva, Pedro María Anaya, San Pedro Nextlalpan, Encinillas, Las Antenas y La Loma, en el municipio que gobierna el alcalde panista.

Los Bárcenas se han apoderado de 10 kilómetros del oleoducto y se dedican a la sustracción, resguardo, transporte, almacenamiento, distribución y comercialización de hidrocarburos. Con sus perforaciones han afectado el ducto de Tuxpan-Tula y Tula-Salamanca.

Carlos Bárcenas, El Pelón, tiene un chofer de confianza apodado El Pirlo; un grupo armado de vigilancia, una célula identificada como Los Caguamos y otra como Los Pipas; además, en su estructura se encuentra su hijo Carlos Bárcenas.

Se identifica a Tomás Barrera como operador y distribuidor; Yesenia Barrera se encarga de almacenar y distribuir el hidrocarburo; Miguel Cisneros, es jefe distribuidor, y otras seis personas trabajan de distribuidoras.

Bajo las órdenes del alcalde está su operador Humberto García, El Pájaro o El Cuervo; Brandon García, El Kilo, quien funge de distribuidor, y Pio Lugo, quien almacena el combustible robado.

El documento señala que policías ministeriales les brindan protección. También se incluye a Julio Armando Castro, trabajador de Pemex, quien cuenta con seis personas para la distribución.

Por otra parte, el cártel Santa Rosa de Lima, de José Antonio Yépez, El Marro, ha afectado los sistemas de transporte en Salamanca-Vista Alegre-Zacatecas; Salamanca-TAR León; Salamanca-TAR Morelia; Salamanca-TAR Guadalajara, y Tula-Refinería de Salamanca. Se ha apoderado de 40 kilómetros de ductos a la altura de Cortázar.

Opera en el llamado Triángulo de las Bermudas y en los alrededores tiene por lo menos cinco ranchos y siete predios. Opera en Villagrán, Celaya, Salamanca, Santa Cruz, Juventino Rosas, Irapuato y Valle de Santiago.

El Marro cuenta con una gran estructura para operar; un grupo se seguridad y otro de sicarios; se identifica a los hermanos Lara Belman como los segundos al mando.