Martes 22 de enero de 2019, p. 11
La Comisión Temporal de Presupuesto del Instituto Nacional Electoral (INE) aprobó la propuesta que se presentará al Consejo General para absorber el recorte de 950 millones de pesos que decretó la Cámara de Diputados al organismo. Ante el boquete administrativo
que no es posible absorber, la comisión aprobó no trasladar al fisco el impuesto sobre la renta de sus trabajadores entre julio y diciembre de este año, del que obtendrían más de 600 millones de pesos.
Al justificar la medida, el director ejecutivo de Administración, Bogart Montiel, sostuvo que la determinación de optar por que el peso central para absorber el ajuste presupuestal se haya puesto en postergar el cumplimiento de obligaciones fiscales
entre julio y diciembre, se debe a la imposibilidad de hacerlo en otros rubros que pondrían en riesgo el cumplimiento de sus obligaciones constitucionales. La medida se mantendría hasta obtener una ampliación presupuestal.
Durante la sesión de la comisión se presentó el proyecto que se discutirá esta semana en el Consejo General; la presidenta, Claudia Zavala, explicó que en el proyecto el INE absorbería 330.8 millones de pesos mediante ajustes en diversas partidas y proyectos. Sin embargo, subrayó, hacernos cargo de todo era imposible
, por lo que se optó por trasladar el recorte hacia incumplimientos de tipo contable y así garantizar el ejercicio de los derechos político-electorales.
Zavala destacó que el instituto decidió garantizar sus tareas en los procesos electorales debido a que éstos dan estabilidad y paz social en el traslado de gobierno, por lo que había que decidirse por otros rubros. Es la primera vez que el INE está trabajando con este boquete administrativo
.
En entrevista realizada al mediodía, el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, reconoció que de persistir el recorte en su totalidad, en algún momento del año
no se contará con los recursos necesarios para cumplir algunas de sus obligaciones constitucionales.
Ante ese escenario, continúan las gestiones con las secretarías de Hacienda y de Gobernación para sortear esta crítica
situación y obtener los 619 millones de pesos que representará el gasto destinado a la organización electoral en cinco entidades, recursos con que el INE no cuenta.
En la sesión de la comisión, el consejero Ciro Murayama explicó que éste es el recorte más grande en la historia del INE, situación sin precedente que le impide asumir sus obligaciones. Por ello, en la propuesta que se aprobó hay ya 338 millones de pesos producto del recorte directo a distintas áreas, actividades y pagos de bienes y servicios, agregó.
A pesar de que no cuentan con los 619 millones de pesos adicionales, que es el costo del trabajo de campo en las elecciones de este año, se garantizará su realización. No trasladar los impuestos es una salida contable que se confía en resolver mediante el diálogo para obtener los recursos referidos. Estamos colocando ese déficit en el capítulo 1000
, aclaró.