Armando Guadiana –de Morena–, presidente de la Comisión de Energía del Senado de la República, aseguró que el huachicoleo “nació desde dentro de Pemex: en esa empresa pública del Estado existe una dirección que se llama Proyectos J, que se dedica a las cosas urgentes. Muchas personas querían esa dirección. Ahí se contrataron a 10 empresas para reparar las fugas en los ductos, ahora solamente quedan cuatro, pero todas deben ser investigadas porque ellas empezaron con el huachicoleo”.

Guadiana, senador y empresario coahuilense, sostuvo que de acuerdo con la información que ha podido recabar, “fueron esas compañías contratadas por Pemex para reparar las fugas las que empezaron las ponchaduras en los ductos para tener trabajo siempre. El huachicoleo no surgió para vender combustible, sino para mantener contratos”, sostuvo el senador.

Como los ductos pasan por ejidos, además de zonas rurales y urbanas, los ejidatarios se enteraban de que de había una fuga, ellos veían que salía gasolina, la empezaron a recoger y vender. Aquella parte del negocio de la reparación de ductos se convirtió en uno de venta de combustible robado. Esto no es de uno o dos años: empezó en los gobiernos de los presidentes Ernesto Zedillo, siguió con Vicente Fox, con Felipe Calderón y se expandió con Enrique Peña Nieto, afirmó el presidente de la Comisión de Energía del Senado.

Después, al negocio entró el crimen organizado, que controla desde hace años esa actividad; agregó que en febrero, al comenzar el periodo ordinario de sesiones en el Senado, presentará al pleno el dictamen el punto de acuerdo de Cruz Pérez Cuéllar, del grupo parlamentario de Morena, quien exigió en diciembre pasado investigar a la empresa Sonigas por presunta sustracción de hidrocarburos, así como prácticas monopólicas en el ramo de gas.

Pérez Cuéllar dijo que el primer robo de combustible de los ductos se registró hace 19 años, empezó en 2000, cuando se conocieron las primeras 15 ordeñas. Sólo el año pasado, hasta septiembre, se detectaron 7 mil 642 perforaciones ilegales. El senador afirma que las fugas de gasolina se han incrementado sobre todo en los estados de Jalisco y Guanajuato.