El gobernador del estado de México, Alfredo del Mazo Maza, dio a conocer que acordó con la Secretaría de Gobernación que la policía estatal se sumará al resguardo de las pipas que trasladarán gasolina al valle de Toluca, pues el ducto que suministra combustible a la capital mexiquense y sus municipios conurbados ha sido saboteado durante varias ocasiones en días recientes, por lo que 54 por ciento de las estaciones de servicio localizadas en esa ciudad y 13 municipios aledaños carecen de gasolina.

En gira por el municipio de San Felipe del Progreso, el mandatario mexiquense informó que se reunió con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, y con gobernadores de entidades –sin precisar quiénes– que han padecido desabasto como resultado de la lucha emprendida por el gobierno federal contra el huachicoleo. El encuentro, dijo, sirvió para convenir diversas acciones que ayuden a superar la crisis rápidamente.

Por su parte, Silvano Aureoles Conejo, homólogo de Michoacán, afirmó en Morelia que probablemente en los próximos días sea abierto el ducto Salamanca-Tarímbaro, lo que permitiría regularizar el desabasto de combustible que prevalece desde hace 20 días en la capital estatal, así como en municipios vecinos como Pátzcuaro, Tarímbaro, Charo, Indaparapeo, Queréndaro, Hirmaba y Lagunillas.

Mientras, el gobierno de Morelos dio a conocer en un comunicado que hay desabasto en gasolinerías de Cuautla y Cuernavaca; consideró que la escasez de combustible en esas ciudades fue resultado de que miles de habitantes procedentes de Ciudad de México y su zona conurbada acudieron a esos municipios desde el viernes pasado para abastecerse ante la seria situación que se vivió en la capital.

En tanto, Petróleos Mexicanos envió ayer por la madrugada a Saltillo, Coahuila, 800 mil litros de gasolina Magna por medio del poliducto Satélite; con esa acción la mayor parte de las estaciones de servicio de esa localidad reiniciaron sus actividades. No obstante, más de 40 de las 140 gasolinerías de la ciudad permanecieron cerradas en espera de que pronto se regularice el abasto.