Madrid. Tras una larga y polémica negociación, el Partido Popular (PP) y Ciudadanos obtuvieron este miércoles el apoyo indispensable de la agrupación ultraderechista Vox para gobernar la región española de Andalucía.

“Estamos muy satisfechos. Hoy pierden las leyes liberticidas, la inmigración ilegal y la corrupción. Por fin se acaba el cortijo de la izquierda en Andalucía”, expresó Javier Ortega Smith, número dos de Vox, en Sevilla, al presentar el acuerdo, compuesto por 37 puntos.

Juan Manuel Moreno, líder regional del PP y nuevo presidente de Andalucía, afirmó en rueda de prensa: Hoy comienza el cambio, en referencia de los pactos firmados, por separado, con Ciudadanos y Vox. La ceremonia de investidura podría ser el 16 de enero.

Algunos de los puntos del pacto son la creación de empleos de calidad, realizar una auditoría independiente a todos los organismos del gobierno andaluz, tras varios escándalos de corrupción protagonizados por altos funcionarios socialistas, y evitar cualquier injerencia de los poderes públicos en la formación ideológica de los alumnos.

También incluye un llamado a combatir la inmigración indocumentada, y se acuerda defender y promover la tauromaquia, la caza, el flamenco y la Semana Santa.

En su texto para apoyar a Moreno, Vox pidió la apertura de un proceso nacional de devolución al Estado de las competencias de Educación, sanidad, justicia y orden público. Además, derogar leyes de género y de memoria histórica aprobadas por los gobiernos socialistas, expulsar a 52 mil indocumentados y quitar ayudas a asociaciones feministas, entre otros puntos.

Esta posición alertó al poderoso movimiento feminista en España y suscitó críticas incluso entre las filas del PP.

Fuentes del gobierno del presidente socialista de Pedro Sánchez dijeron lamentar la radicalización del PP y Ciudadanos por el pacto con la ultraderecha.

Santiago Abascal, presidente de Vox, alardeó este miércoles en Twitter haber impuesto parte de su programa en el acuerdo alcanzado para permitir un gobierno de coalición en la región andaluza.

A finales del mes pasado, los partidos PP y Ciudadanos alcanzaron un pacto para gobernar Andalucía, la región más poblada de España con más de 8.2 millones de habitantes, después de 36 años de hegemonía socialista.

En los comicios regionales del pasado 2 de diciembre ambos partidos obtuvieron 47 de los 109 escaños de la cámara regional andaluza. Pero para alcanzar la mayoría necesitaban el apoyo de Vox, el partido de la ultraderecha que dio la sorpresa al ganar 12 curules.