Las mujeres se apoderaron del Zócalo capitalino en un sábado donde confluyeron diversas épocas y géneros musicales.

La tradición y la modernidad se conjuntaron en un ambiente de esperanza ante el inicio de la cuarta transformación.

A la plancha de asfalto llegaron cientos de espectadores. Disfrutaron del concierto Voces de mujeres, en el que Cecilia Toussaint fue designada Patrimonio cultural vivo por el gobierno de Ciudad de México.

El reconocimiento se debe a su invaluable contribución al rock nacional, con una trayectoria de 40 años y su compromiso por la lucha democrática del país, expresó Gabriela Rodríguez, titular de la Secretaría para la Autonomía de las Mujeres, quien estuvo acompañada por José Alfonso Suárez del Real, cabeza de la dependencia de Cultura capitalina, la cual organizó el espectáculo.

También se presentaron Caña Dulce y Caña Brava, María Daniela y su Sonido Lasser, Ely Guerra y Lila Downs.

Consignas a favor del aborto

Entre el público resaltaron unos pañuelos verdes regalados antes del espectáculo con la frase #abortoParaTodoMéxico #abortoLegalYa.

Las mujeres somos sexo, inteligencia y verdad, dijo Ely Guerra, quien interpretó un repertorio romántico de diversos compositores, el cual fue agradecido por sus seguidores que –con gritos y aplausos– no dejaban de halagarla.

En el escenario montado frente a Palacio Nacional, la cantante afirmó: Es momento de hacerlos sentir y vibrar con canciones que nos legaron compositores maravillosos y nos antecedieron rompiendo la barrera del género.

Antes, las integrantes de Caña Dulce y Caña Brava pusieron el toque alegre con sones y zapateados; el requinto y la jarana sacudieron al público con versos que aludieron a la igualdad de género; se manifestaron contra la violencia y destacaron la presencia femenina en la vida pública.

La noche dedicada a las mujeres siguió con las interpretaciones de Toussaint, quien puso el toque roquero y recordó a Betsy Pecanins una compositora, cantante, mujer entrañable, amorosa amiga.