Enfrentan militares depresión, ansiedad, esquizofrenia y trastorno de la personalidad como secuelas de los enfrentamientos; 2 mil 464 marinos han recibido tratamiento siquiátrico o sicológico
Lunes 26 de noviembre de 2018, p. 11
Depresión, ansiedad, esquizofrenia y trastorno de personalidad, son las secuelas en algunos elementos de las fuerzas armadas durante los 12 años recientes en que salieron de sus cuarteles para realizar labores de seguridad pública y enfrentar al crimen organizado. En ese periodo, más de 50 mil militares desertaron.
En dos sexenios, elementos de las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena) y Marina-Armada de México (Semar) se enfrentaron en 4 mil 400 ocasiones contra integrantes de organizaciones criminales. Ahí, sus compañeros vieron morir a 263 militares y 50 marinos.
Al repeler las agresiones, la Sedena abatió a 3 mil 907 personas, mientras la Marina respondió en 176 ocasiones dando muerte a 449 civiles armados, según información de ambas dependencias.
Atención siquiátrica y sicológica
Para atender los niveles de estrés postraumático, la Defensa Nacional reporta 35 médicos especialistas en siquiatría, certificados por el Consejo Mexicano de Siquiatría y Sicología; en tanto, la Armada de México cuenta con ocho siquiatras para dar tratamiento a sus elementos.
La Sedena fue la institución que reportó más agresiones contra militares, al dar un total de 4 mil 226; no obstante, informó que sólo 30 elementos recibieron tratamiento por trastorno de estrés postraumático.
Por otra parte, la Semar informó que de 2010 a 2017 fueron 40 los elementos diagnosticados con trastorno de estrés postraumático; los casos ocurrieron en Tamaulipas, estado de México, Colima, Veracruz, Quintana Roo, Guerrero, Sonora, Baja California Sur, Campeche y Michoacán, durante actividades en operaciones de seguridad.
En 2010 la Semar comenzó a llevar el registro de casos de trastorno de estrés postraumático en el Departamento de Salud Mental, de la Dirección General de Sanidad Naval. De acuerdo con la dependencia, hasta 2017 diagnosticó un total de 2 mil 464 marinos en activo con algún tipo de trastorno o enfermedad mental, de los que mil 279 sufrieron ansiedad y 647 depresión. El año con más casos fue 2010, con 226 que presentaron un cuadro de ansiedad y 96 de depresión.
Informó que en 2010 fueron 425: 154 sufrieron depresión y 270 ansiedad; en 2011 fueron 327: 123 depresión y 204 ansiedad; en 2012, 333 casos: 126 con depresión, 201 ansiedad, dos con esquizofrenia y dos con trastornos de personalidad.
En 2013 fueron 305: 114 con depresión, 184 con ansiedad, uno con esquizofrenia y dos con trastorno de personalidad; 2014 registró 259 casos: 75 con depresión, 175 ansiedad, tres con esquizofrenia y tres con trastorno de personalidad.
En 2015 fueron 291: 119 con de-presión, 168 ansiedad y dos con trastorno de personalidad; en 2016, 279 casos: 108 con depresión, 165 con ansiedad, dos con esquizofrenia y dos con trastornos de personalidad; y en 2017, 245: con depresión 106, 137 con ansiedad y uno con trastorno de la personalidad.
Los efectivos con trastorno de estrés postraumático fueron tratados con antisicóticos, benzodiacepinas y anticonvulsivos; además, indicó que 10 marinos se suicidaron y 58 resultaron afectados físicamente en los enfrentamientos.
Deserciones en todos los niveles militares
Por otra parte, hubo deserción de jefes, oficiales y tropa de la Sedena; de acuerdo con la dependencia, 50 mil 653 dejaron las filas castrenses.
La mayoría de las deserciones ocurrió en el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa, al registrar 42 mil 986 efectivos desertores, de los que 42 mil 589 eran de tropa (soldado, cabo y sargento), 387 oficiales (subteniente, teniente y capitán), y 10 jefes (mayor, teniente coronel y coronel). En el sexenio del presidente Enrique Peña Nieto –que está por concluir– desertaron 7 mil 667 militares, de los que 6 mil 508 eran tropa, 139 oficiales y cinco jefes.