Jueves 8 de noviembre de 2018, p. 39
El reto para mejorar la atención paliativa todavía es muy grande y aún no es suficiente lo que se hace, afirmó Bernardo Villa, jefe del departamento de cuidados paliativos de la Dirección General de Calidad y Educación en Salud de la Secretaría de Salud (Ssa).
Indicó que en 2016 se registraron 466 mil 235 defunciones por enfermedades susceptibles de estos cuidados, de los cuales 279 mil 15 ocurrieron en los domicilios de los fallecidos sin poder asegurar que recibieron una atención adecuada en su padecimiento.
En la sesión general del departamento que encabeza, realizada en el Instituto Nacional de Cancerología (Incan), explicó que sólo 40 por ciento de las clínicas de cuidados paliativos cuenta con atención a domicilio y pocas brindan servicio las 24 horas.
Añadió que de las 119 unidades de servicios de este tipo en el país, 59 están en el segundo nivel de atención, 34 en el tercero y sólo 26 en el primer nivel. Ninguno de ellos está en área rural.
Por su parte, el director general del Incan, Abelardo Meneses, dijo que según un análisis, 10 por ciento de pacientes que llega por primera vez debe ir a cuidados paliativos.
Destacó que en el país se requiere trabajar en cursos de capacitación para médicos relacionados con la prescripción de opioides. Uno de cada 10 pacientes es tratado adecuadamente, el resto muere con dolor
, a pesar de que ya se han modificado las leyes para permitir el acceso a estos medicamentos.
Villa agregó que entre médicos, pacientes y personal del sector salud existe la opiofobia, miedo a manejar esos medicamentos
. Además, señaló que hay una sobrerregulación en el uso de éstos.
Villa y Jesús Ancer, secretario del Consejo de Salubridad General, se pronunciaron por la capacitación para las familias de esos pacientes.