Nogales, Son., Ante la llegada de migrantes a la frontera de México con Estados Unidos, el gobierno estadunidense envió a cientos de elementos de la Guardia Nacional para que con medidas precautorias eviten el cruce de los miles de indocumentados que vienen en la caravana migrante.

La tarde del martes, cientos de militares se instalaron en la zona fronteriza que divide los municipios de Nogales, Sonora, y Arizona para colocar alambre de púas en la parte superior del muro de metal que divide la frontera de ambos países, mientras en Estados Unidos se realizaban las votaciones intermedias.

Primeros de 15 mil

Los soldados estadunidenses arribaron en unidades blindadas a las garitas Dennis DeConcini y la peatonal Morley, con la instrucción de dar inicio a la colocación del alambre con púas. Se negaron a realizar alguna declaración, pero trascendió que forman parte del primer grupo de los 15 mil soldados que planea enviar el presidente Donald Trump a la línea divisoria.

Antonio Estrada, sheriff del condado Santa Cruz, señaló que el objetivo de las políticas migratorias de Trump es fomentar el miedo en ambos lados de la frontera. Puntualizó que los soldados no tienen permitido enfrentamientos o contactos con la comunidad; dichas labores se darán a los oficiales de Arizona y a agentes de la Patrulla Fronteriza.

Detalló que son dos compañías del ejército de Estados Unidos las que se instalaron en Nogales y en el condado Santa Cruz para iniciar labores de vigilancia y protección.

Señaló que un teniente militar del país vecino refirió que los soldados, quienes vienen a bordo de 40 vehículos, se instalarán en la frontera para proteger la infraestructura de edificios y prestar protección. Se hospedarán en las instalaciones de la Guardia Nacional ubicadas sobre la Western Avenue de Nogales, Arizona.

En las próximas horas, los soldados estadunidenses prevén realizar algunos simulacros para ajustar protocolos de actuación en caso de que un contingente de la caravana de migrantes llegue a Nogales, Sonora.