Jueves 8 de noviembre de 2018, p. a11
En San Diego, donde entrena para su próximo combate en diciembre, Saúl Canelo Álvarez recibió una llamada desde Guadalajara. Era el aviso de que había ganado el Premio Nacional de Deportes 2018. En los meses recientes, el pelirrojo concretó éxitos invaluables y rimbombantes, como vencer a Gennady Golovkin y la firma de un contrato por 365 millones de dólares, un hito en la historia del deporte. Pero lo que ocurrió la tarde del lunes era distinto.
Para alguien que se encuentra en el cénit del éxito, parecería que un reconocimiento más se pierde en un océano de conquistas. Pero recibir el máximo premio que otorga un país a sus deportistas, sabe distinto a todo, cuenta el mánager de Canelo, José Chepo Reynoso.
“Nos abrazamos con Canelo, mi hijo Eddy (entrenador) y yo, porque claro que le hacía ilusión a Saúl”, comparte Reynoso; pero inmediatamente seguimos trabajando, porque a pesar de la fama y los reconocimientos, hay que chingarle como cualquier aprendiz
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Ascenso vertiginoso
El reconocimiento también lo asumieron como propio en el equipo que integra el entrenador Eddy y Chepo, artífices de la carrera del Canelo desde que era un niño amateur que consiguió dos medallas –plata y oro–, y el ascenso vertiginoso del peleador desde que debutó como profesional a los 15 años.
Cuando volteó a mirar el pasado, aún veo a aquel niño pecoso de origen humilde que quería triunfar en el boxeo
, cuenta Chepo; ese muchacho que desde aquel día no ha dejado de trabajar con disciplina como cualquier novato
.
Lo que más entusiasma en el equipo es que este reconocimiento coloca al Canelo en una posición ejemplar, de deportista modelo. Un alivio después de los meses difíciles que representó la sanción por el positivo de clembuterol y la cancelación del combate con Golovkin en mayo.
Somos un equipo al que nos ha ido muy bien
, comparte Chepo; pero que todo ha sido empeño, desde el primer día que trabajamos con aquel niño pecoso, hasta ahora con todos estos logros y a un mes de su siguiente pelea, todo ha sido trabajo honesto y nada más
.